F. Fresas | Ryō/Alice |

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Sin spoilers importantes, situado el futuro ficticio de B y C.

Fresas

Alice no puede evitar sentirse orgullosa de su princesita, desde el momento de su nacimiento hasta la actualidad. La albina observa, encantada, cómo su niña de diecisiete años va la primera en el ránking de ventas de la calle principal en el Festival de ofrenda a la luna. Alice sabe que la habilidad de Hanne a la hora de cocinar es de las mejores de segundo año, rivalizando siempre por el primer puesto con su prima Akane, poseedora de la lengua divina; Iruka, quien tiene un olfato tan bueno como el de su padre y Kazuma, experto tanto en comida japonesa como italiana.

La chef vanguardista prueba otro bocado de ese extraño dulce de fresas que juega con distintas texturas y temperaturas, de esa delicia que su niña ha creado junto a la hija de Hisako para competir contra el grupo de Akane, Kazuma e Iruka, pues al parecer tuvo una ligera riña con ellos y en el último momento decidió hacerlo por su cuenta a pesar de que antes formara equipo con ellos; poco después la separación del grupito Mio Aldini se unió a Hanne para enfrentarse a su primo. Alice piensa que ese par que hasta ese entonces no había trabajado en conjunto es realmente bueno. Ryō, a su lado, también come tranquilamente el dulce sin ninguna expresión en particular, aunque si estuviera en su modo Berserker en esos momentos estaría gritando y animando a su hija para que aplastase al mocoso de Hayama y a la mocosa de Yukihira.

Alice deja a su esposo sentado en el banco desde el que observan el puesto de Mio y Hanne y se dirige hacia ellas. En esos momentos su hija se encuentra cocinando y Mio despachando a los clientes. La mujer se lleva el dedo índice a la boca, pensativa, mientras espera pacientemente su turno.

—Oh, Alice-san, hola de nuevo —saluda Mio—, ¿otras dos porciones más?

Alice asiente, todavía pensativa.

—Oye, Mio-chan —empieza sin poder ocultar su curiosidad, mientras la medio italiana le emplata los dulces de fresa—, ¿de qué fue la discusión que tuvo Hanne con mi sobrina y el resto?

Mio esboza una sonrisa muy a lo "Isami", Alice acepta los postres que la estudiante le ofrece, esperando paciente la respuesta que está segura obtendrá.

—Con mi querido primo y Aka-chan porque tenían visiones muy distintas, con Hayama-san porque al parecer no soportaba que hubiera tantos kōhais revoloteando al rededor de ellos mientras admiraban a Hanne-chan.

Alice suelta una sonora carcajada que llama la atención de su hija en la cocina del puesto y de su marido en el banco aunque ninguno de los dos dice nada, le entrega a Mio los tickets que usan como dinero en el festival y le guiña un ojo.

—Gracias por la información, Mio-chan.

—Un placer, Alice-san.

Sí, Alice no sólo está orgullosa de su hija por lo buena que es en la cocina, también lo está por su actitud alegre y un tanto burlesca que heredó de ella y la extraña doble actitud que saca a relucir a la hora de cocinar: a veces apática y a veces intensa que heredó de su padre; esa actitud la hace popular y Alice lo sabe. Otra cosa de la que está orgullosa es de su aspecto físico, y no porque sea guapa, sino porque sus ojos rojizos a veces se parecen más a los de ella y otras veces más a los de Ryō, orgullosa porque su niña decidió que su pelo negro también tuviera algo de su madre y por ello se lo decoloró y tiñó de blanco, dando una extraña combinación en las que las raíces eran negras y el resto de su largo pelo albino. Ella adoraba a su hija, Ryō adoraba a su hija y de vez en cuando era un poco celoso.

Alice entonces se da cuenta que que cierto adolescentes de piel morena y ojos verdes también adora a su hija y que le da un poco de rabia no poder demostrarlo de la misma forma en la que lo hacen los admiradores de Hanne.

Lo que siente Hayama Iruka no son celos, es impotencia por no poder demostrar sus sentimientos libremente como lo hace el resto.

Shokugeki - One-shots -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora