Juuzou Suzuya y tú.
Escribí este libro hace 500 años, por favor ten en cuenta que era mi época de cringe.
Eres fanática de los ghouls, y, aunque no quisieras ser comida por uno, por ende, te gustaría entrar a la CCG, y mejor aún, conocer a ese agent...
_____- era lógico lo que pasaría, el Albino corrió a abrazar a Shinohara luego de derramar algunas de sus lágrimas más sinceras... Por mi parte no podía creerlo, pero tampoco le tomaba mucha importancia, realmente me hacía muy felíz ver a Shinohara San de nuevo después de tanto tiempo, tiempo que ha parecido una eternidad y al mismo tiempo nada.
Juuzou - Shinohara San - apenas pudo decir entre sollozos con esa voz cortada y débil - quiero decirte algo.
Shinohara - ¿qué pasa, pequeño? - acarició el cabello de quien más bien parecía su hijo.
Juuzou - también entristecería si te pasa algo...
Pequeñas lágrimas silenciosas caían por las mejillas de aquél robusto hombre, su sonrisa decía más que mil palabras.
Shinohara - _____, qué alegría verte...
Quizá ese abrazo compartido con esos dos hombres, fue el más cálido que había tenido desde hace mucho tiempo, incluso quizá el mejor que había tenido...
(...)
- ¡limpien todo! ¡tenemos suerte de que los ghouls no hayan tenido refuerzos! ¡bien hecho señores!
_____- de acuerdo... Iré con los otros entonces.
Shinohara - grandioso, también hablaré contigo después - agrandó su sonrisa.
Pero antes de irme, aprecié esa escena tan..."padre e hijo"
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Shinohara - supongo que tenemos mucho de qué hablar... Espero que no te moleste que haya mandado a _____ con los demás.
Juuzou - para nada - sonrío.
Juuzou - a pesar de tanto tiempo sin él, su voz me seguía siendo familiar, nada había cambiado, era el mismo de siempre, con esa radiante sonrisa de la cual yo nunca entendía su motivo de ser, pero ahora queda más que claro, supongo.
Hablamos por más tiempo de lo esperado, incluso Shinohara San decidió llevarme a una cafetería, acción que me dió demasiada nostalgia, no podía creer lo que sucedía, no quería que ese día terminara.
Shinohara - bueno - soltó una carcajada con esa grave voz - ¿y qué me cuentas de _____?
Juuzou - ¿eh? Bueno, vivo con ella - mordí mi rosquilla - a veces es aburrida e irritante, me divierte molestarla.
Shinohara - bueno...Más a fondo - agrandó su sonrisa y colocó ambos brazos cruzados sobre la mesa - antes dijiste que entristecerías si me pasa algo... ¿te entristecería si a ella le pasara algo?
Juuzou - ¿eh?
(...)
_____- ya era algo tarde y, aunque mi casa debería sentirse más tranquila y cálida, sólo sentía un enorme hueco, un vacío en el sofá, falta de ruido en la cocina, y había rosquillas en la despensa...
