Orgullo.

Capitulo 9.

Porque al único que quiero follarme ahora eres tu.

Myungsoo: Tu quieres no?

Sungyeol: No

Myungsoo: yo se que si

Sungyeol: si estas tan seguro de eso porque no vienes a mi casa y ...si me convences, no estoy  diciendo que sea seguro

Myungsoo sonrió de lado ante la respuesta de sungyeol. Se levanto casi que como si su vida dependiera de ello, corrió por su casa, salio y subió a su auto para conducir a la casa de Sungyeol.

Sungyeol.

Me dejó en visto?

Bueno, baje a la cocina sin hacer ruido, saque un poco de agua, tome y cuando iba a subir sentí mi celular vibrar para ver un nuevo mensaje de Myungsoo.

Myungsoo: puedes abrir?

Sungyeol: que?

Myungsoo: estoy afuera de tu casa

Enserio había venido?, camine a la puerta y la abrí para verlo recostado en su auto con su sonrisa de lado.

- no pensabas que vendría?

No

- no iba a perder una oportunidad como esta

Y bien, como me convences , lo rete.

Myungsoo se fue acercando a mi, rodeo mi cintura y pego su rostro al mio, sus penetrantes ojos me veían fijamente con su expresión que decía solo una cosa, te deseo.

Que quieres?

- te quiero tener bajo mi cuerpo, gimiendo mi nombre

Y si yo no quie, mis palabras las detuve al sentir sus manos en mi trasero, lo estaba apretando tan bruscamente.

- tu no que?

Y..yo

- ah!, gemi al sentir su lengua pasarse por mi cuello.

Que estábamos haciendo en la puerta de mi casa, cualquiera pasaría y nos vería en esta situación.

Lamió mi cuello mientras sus manos seguían apretando mi trasero con fuerza.

Myung...soo

- mmm?

estamos en la calle y

- entonces vamos a tu cuarto, me susurro al oído de una manera tan sensual que me hizo estremecer por solo aquellas palabras.

Sin decirle nada, me moví de la puerta para darle permiso a que entrara, le hice señas con mi dedo en mi boca a que guardara silencio. Subí las escaleras siendo seguido por el, apenas toque la perilla de mi cuarto, sus manos me voltearon y quede frente a el, se acercó a mi y con mucha desesperación beso mis labios. Abrió la puerta con su mano y me hizo retroceder cerrando la puerta detrás de el, me apego más a su cuerpo haciendo que no hubiera ningún espacio entre nosotros.

La forma tan necesitada con la que me me basaba me encantaba, mordió mi labio inferior para separarse de mis labios y empujarme a la cama, se subió encima de mi a desvestirme. Deje que sus manos hicieran todo, tan  sumisamente.

Una vez ambos estábamos desnudos volvió a besar mis labios con deseo, bajo a mi cuello, lamiendo y mordiendo cada parte de el, sabia que me dejaría muchas marcas, sus besos y lamidas siguieron bajando por mi pecho, metió a su boca uno de mis pezones, mientras con su mano jugaba con el otro, continuo recorriendo mi vientre, cadera y

Agh!

Abrió mis piernas y lamió mi entrada, woow! Se sentía tan bien. En otro momento lo encontraría asqueroso pero ahora estaba haciendo un esfuerzo por controlar mis gemidos, no quería que mis padres me oyeran.