Orgullo.

Capitulo 19.

El chico de baja estatura había sabido de cada uno de los supuestos “sustos" que le hacían a Sungyeol. No odiaba al más alto pero solo había una razón para querer hacerle un poco de daño, y eso era debido a que Sungyeol siempre estaba por encima de el académicamente, siendo becado quería tener la mejor puntuación y el primer puesto en todo, se mataba estudiando todo el día, siendo su única prioridad pero igual quedaba en el segundo puesto, al  cambio del alto que nunca bajaba del primero. La personalidad del alto era un poco orgullosa y apartado de los demás lo que lo hacia parecer engreído, las envidias que le tenían eran grandes y evidentes para el y para cualquiera que lo viera.
Como era mejor conocido “el chico perfecto". Apuesto, inteligente y de buena familia.

La desesperación, que luego se volvió una codicia lo hizo tomar esa decisión, el día de la prueba la cual contaría con muchos puntos para las notas finales, sin pensarlo entro a la sala de maestros y se arriesgo buscando las hojas de los exámenes que antes habían hecho, su pensar era dañar el examen del alto pero no contó con que en ese momento llegara el chico que recién había llegado. “Myungsoo". Siendo amenazado volvió a guardar los exámenes y se fue con rapidez sin poder hacer nada. Al otro día como era de costumbre el chico que siempre lo molestaba junto a sus amigos “kai", siendo objeto de burlas alguien por primera vez lo defendió, acto que lo tomó por sorpresa, al ver que era defendido por Sungyeol. “El lo estaba defendiendo". ¿por que? esa preguntas se hicieron presentes en su cabeza, Aquello y las palabras que Myungsoo le había dicho el día anterior lo  hicieron cambiar de parecer. Tal vez Sungyeol no sea tan malo y si quería conseguir algo debía esforzarse por ello sin tener que recurrir a jugar sucio como había dicho Myungsoo.

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La madre del más alto dejo una nota para su hijo en su cuarto, al mirar la hora en su celular ya tenia que irse, su viaje saldría en unos minutos y Sungyeol aun no llegaba de clases. Junto al señor Lee salieron de casa para irse hasta el aeropuerto donde tomarían el vuelo a china, lugar en el que tenía una reunión con socios de la empresa.

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El azabache no dejaba de marcar el numero de Sungyeol y el de Jiyeon pero no obtenía respuesta, aun no podía comprender que pasaba. ¿por que Jiyeon había hecho esto? “Todo era como un sueño raro que sueles tener". Subiendo a su auto fue hasta su apartamento y siguió insistiendo llamando a jiyeon.

Cada minuto pasaban como horas, confundido, desesperado y frustrado sin saber que más hacer, había pasado toda tarde, llamando y llamando una y otra vez.

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Por otro lado se encontraba el más alto que había despertado, cansado de pedir que lo soltaran y solo recibía risas de Jiyeon y las otras chicas, las escuchaba hablar y reírse escandalosamente, sabía que la razón de su burla era el, otro sonido que había era un celular que no dejaba de sonar.

-no se que te ven los demás -se acercó Jiyeon.

-dicen que es un fácil -dijo una chica de pelo corto, haciendo que rieran otra vez.

-suéltenme -gruño Sungyeol.

-de aquí no saldrás tan fácilmente Sungyeol -volvió a reír Jiyeon.

El alto estaba enojado, perdido sin entender porque le hacían eso.

-¿por que me tienen aquí?

-las chicas tendrán sus razones pero por ahora te diré las mías Sungyeol -dijo jiyeon-. Cuando entre a segundo de primaria... aun recuerdo muy bien aquel incidente donde yo sin querer hice que te cayeras y te rompieras el brazo. ¿te   acuerdas? -le pregunto enojada.

-no -negó el alto tratando de acordarse de ello.

-como lo imagine, no te importan los demás, porque te acordarías de ese insignificante momento que para ti puedo no ser nada pero para mi no tanto. Ese día mi padre me regaño como nunca lo había hecho.