«Playtime» (Justin Bieber)

El día parte 2

Justin Bieber:
Desperté y lo primero que hice fue ir al baño, necesitaba hacerlo con urgencia. Tomé una ducha y elegí algo simple para ponerme cuando salí, me puse mis clásicos bóxers de CK, un pantalón de mezclilla que se ajustaba perfecto a mi cuerpo, y estaba un poco rasgado de la rodilla derecha, y una camiseta en cuello V blanca, de mis favoritas, y un par de supras blancas.
Cuando estaba terminado de lavar los dientes llamaron a la puerta.
—Joven Bieber el desayuno está listo, lo están esperando para que lo sirvan— Esa fue María, la mujer encargada de la comida y limpieza d día casa, por supuesto que no era sólo ella la que limpiaba la mansión, había más chicas y chicos, pero María era quien tenía toda mi confianza, y la que mejor me caía, teníamos una buena relación era casi de tía-sobrino.
—Enseguida voy, gracias— grité desde el lavamanos mientras escupía lo último de la pasara de dientes que se encontraba en mi boca, la sequé y bajé por las escaleras del lado izquierdo de esa forma llegaba más rápido al comedor.
Al entrar me di cuenta que Scooter se encontraba allí, pero no estaba sólo también estaban Pattie, Jeremy, Jazzy, Jaxon y Alfredo... esperen ¿Alfredo?, fruncí mis ceño y mis cejas de juntaron tanto que parecían una sola, todos voltearon sus cabezas cuando se dieron cuenta de mi presencia.
—Buenos días Cariño, espero que no te moleste que todos estemos aquí— Mi madre se paró rápidamente y me dio un abrazo, era tan pequeña que apenas podían rodearme con sus pequeños brazos, aún así correspondí, la extrañaba tanto y sus abrazos siempre son bienvenidos.
—No me molesta para nada, sólo estoy sorprendido, no los esperaba, ni siquiera a Scooter y mucho menos a Alfredo—lo mire— sin ofender bro. Alfredo sonrío y asintió
—Sentémonos a desayunar y te explicaré todo— está vez fue Scooter quien hablo, todos asentimos y nos sentamos, segundos después apareció Alice junto con María para ayudarla a servir la comida, la presencia de Alice me ponía de malas, era una chica que no se daba a respetar y siempre están coqueteando conmigo, por suerte María fue quien me sirvió mi desayuno.
—Entonces...—comencé rompiendo el hielo, tomando un poco de jugo de naranja.
—Bueno, tus padres y hermanos están aquí porque creen que es prudente conocer a la chica, además es lo adecuado, en cuanto a mí, ya sabes, es mi deber estar contigo Justin, y Alfredo vino porque se lo pedí, ya sabes la chica que escogiste es mexicana y si necesita ayuda oír su no sabe inglés o se le olvida, ya sabes mAlfredo está aquí para eso, suspendió unos cuantos días en el Dangerous Woman Tour—Scooter soltó toda la información de golpe, tantos que tarde un par de minutos en procesar todo.
—Bien, gracias a todos, ¿les parece si bendecimos antes de desayunar?— sonreí y Jazzy salto diciendo que ella quería dar las gracias y bendecir, así lo hizo y después todos comenzamos a desayunar, una vez que todos terminamos Alice y María se llevaron las cosas, le di las gracias a María en español, y al parecer sonó gracioso porque se rió, sí, María es mexicana.
Después de levantarme y de que todos se fueron a la sala me dirigí nuevamente a la habitación para adentrarme en el baño y cepillar mis dientes, bajé y todos estaban sentados, yo les había comentado mi idea sobre decorar el jardín trasero con la piscina para darle la bienvenida a la chica, la chica con la cual soñé, muy extraño pero ella ya me agradaba.
—¿Qué hora es?— pregunté a nadie en específico.
—las 2:15 de la tarde— Me contestó Alfredo.
—Bien, entonces empecemos con esto, me parece que los adornos los tiene mi mamá, ella sabe en dónde están esas cosas en la casa—
—Los traeré—Pattie sonrío y salió de la sala, para dirigirse a algún cuarto de esta mansión.
Los niños estaban afuera jugando con sus pies dentro de la piscina, a unos diez pasos se encontraban Jeremy y Scooter hablando de algo que desconocía, estaba viendo todo eso a través de la gran ventana que separaba a la piscina y jardín del resto de la casa, sonreí y me giré a ver a Alfredo, me senté en el sofá de color blanco, saqué mi teléfono y me acerqué a Alfredo, le enseñaría a Catalina.
—Hey, bro, tienes que ver a esta chica, ella es quien vendrá— sonreí recordando lo guapa que estaba, y su angelical voz, le pase el teléfono a Alfredo y vio todo el video que ayer había visto,  la expresión es que Freddo hacía lo delataban sabía que pensaba lo mismo que yo, ella era demasiado hermosa y cantaba como un ángel.
—Wow, sin palabras, canta jodidamente bien y es tan guapa—Alfredo sonrío, sincerándose.
—Es mi chica, no se te olvide— lo dije en broma y Alfredo rodó los ojos
—¿La chica de quién?—Mi mamá entro con todas las cosas para decorar, me levante rápido para ayudarla, y me sonrojé, al parecer nos había oído sobre lo de Catalina.
—Habló de Catalina, la chica que viene— sonreí al pronunciar su nombre, ¿qué me está pasando?.
Salimos con todas las cosas para la decoración, comenzamos y María salió para ayudarnos, puso una mesa, mientras preparaba bocadillos para ponerlos, entraba y salía de la cocina, al final quedó la mesa con la comida y algunas bebidas, había desde refrescos hasta unas cuantas bebidas con poco alcohol, obviamente escogidas por Pattie, me reí internamente. Del otro lado estábamos here my y yo poniendo las bocinas para la música, Jazzy y Jaxon echaban salvavidas en la la alberca, se veían tiernos, Alfredo ayudaba a Pattie con las decoraciones y Scooter ponía un gran letrero de bienvenida.
—Es muy amable de tu parte hacer esto Justin— Se escuchaba el orgullo en la voz de Scooter
—Es lo menos que puedo hacer por mis beliebers, ellas siempre están para mí sin importar qué—Sonreí, tan pronto como siguiera sonriendo y se me haría la sonrisa del jocker permanentemente— déjame ver cómo se ve—Camine aproximadamente un metro y gire de espaldas para obtener una vista panorámica de todos y del lugar, me gustaba, la piscina estaba adornada con los salvavidas de rosquillas que Jazzy y Jaxon pusieron, había un montón de comida en la mesa que María había puesto en un lado del jardín, en el centro la piscina y del otro lado en una esquina estaba la bocina, sin música aún, en la entrada estaba el letrero de bienvenida, y había globos que partir había puesto elegantemente, estaba todo muy hermoso, estaba tan sumergido en mis pensamientos, hasta que un golpe muy fuerte que procedía del recibidor de la casa se escucho, rápidamente gire y vi a una chica tirada en el piso, me acerqué rápidamente y la vi, ella estaba ahí, y se había desmayado, James y Sam estaban muy alarmados.
—Relájense, y ayúdenme a colocarla en el sofá, ¿Qué ha pasado?—pregunte mientras Sam y yo llevábamos a Catalina al sofá y María entraba con Alcohol etílico y algodón en las manos
—Cuando llegamos ella estaba muy pálida, y parecía que estaba en un trance, incluso se pellizco, parecía que no podía caminar y que el corazón se le saldría del pecho, se escuchaba a Kilómetros lo rápido que iba latiendo su corazón, y cuando puso un pie y lo vio a usted de espaldas se desplomó contra el piso—Está vez fue James quién hablo atropelladamente, María se acercó y pasó el algodón previamente mojado con alcohol en su nariz.
Me había llevado tu gran susto pero ella parecía estar reaccionando gracias a Dios. Lentamente vi como comenzaba a parpadear y yo me encontraba sentado junto a ella.