Pequeño encuentro

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— ¿Sana...?— Mina se levantó de la cama luego de que su esposa saliera corriendo hacia el baño, — ¿Ardilla, estás bien?

—Estoy bien, no ha pasado nada, Mina, volvamos a la cama— dijo mientras se unía a ella en la habitación.

—Ardilla, mañana regreso al trabajo.

—Nooo... Mina, por favor, un día más... quédate conmigo un día más— pidió

—Sana, llevamos tres días metidas en la cama haciendo el amor, no puedo quedarme más tiempo en casa.

—Lo sé, es solo que la última vez que pasamos tiempo así fue hace más de un mes y te extraño mucho, Miguri.

—Yo también, ardilla, prometo que saldremos este fin de semana, ¿De acuerdo?— le animó

— ¿Lo prometes?— mostró a su esposa el dedo meñique para que lo enlazara

—Lo prometo, ardilla...— uniendo sus dedos para cerrar la promesa. —Ahora descansemos...

Al despertar por la mañana, Mina buscó por toda la casa su agenda de trabajo, no recordaba donde la dejó la última vez. Abrió uno por uno los cajones en su tocador pero uno de ellos estaba bajo llave "que extraño" pensó. "Esto no estaba así". Se encogió de hombros, no le dio importancia y sin perder más tiempo salió camino al trabajo.

—Rini, date prisa si quieres ir a visitar a tu maestra— Era Lunes, 9:30 a.m.
era el tercer día de resfriado de la pequeña Rini, Nayeon le dijo que si tomaba sus medicinas con juicio le recompensaría llevándola a ver a su maestra, pues Rini se había encariñado y le había pedido en reiteradas ocasiones poder ir a visitarla.

—Ya estoy lista, mamá.

— ¿Te sientes bien, Rini?— Colocó su mano sobre la frente de su hija.

—Claro que si mamá, quiero ver a mi maestra.

—Entonces vamos.

[...]

—Buenos días Sta. Myoui.

—Muy buenos días, Dahyun, hoy mi esposa... no estoy segura de que pueda venir, se ha tomado el día para descansar, si alguien llega preguntando por ella, entonces... puedes hacerlos pasar que yo los recibiré.

—Si, Sta. Myoui, con gusto.

—Gracias Dahyun, ten un buen día— y se retiró a su oficina


Mina abrió su diario, hace casi seis meses que su esposa comenzó el tratamiento, y cada semana hacían el amor, esta vez no lo dejaría pasar, esta vez ella será un gran "padre". Hace cuatro años cuando salió del país para cerrar aquel negocio, en medio de reuniones y entrevistas no tenía tiempo ni para tomar el teléfono, cuando por fin tuvo un espacio a solas, llamó a casa pero Nayeon no contestaba, lo que ella no sabía era que Nayeon se había estado quedando en casa de su amiga Jennie, ya que habían pasado casi tres semanas y Mina no regresó ni llamó luego que cruzó la puerta, además que su padre se había empecinado en presentarle a aquel joven.

Mina logró recordar el número de su suegro y le marcó, pero el padre de Nayeon le informó de la muerte de su hija «Suicidio». Se negaba a creerlo, Nayeon no podría haber muerto, mucho menos suicidarse, su suegro le envió por correo la dirección y el nombre del lugar donde estaría sepultada. De inmediato Mina viajó regresando a Corea.

Su corazón se rompió al ver que era cierto... lloró desconsoladamente durante meses, se alejó de todos. No quiso regresar nunca más a ese país, no quería volver a la casa, no quería recordar a Nayeon.

Reconstruir el pasado [Minayeon & SaMo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora