Nuestro último deseo (Naruhina -Sasusaku - Saiino)(Terminado)

Devuelta a la realidad

-Si yo creo que nos iremos temprano por Ino - Dijo el azabache tomando la mano de su novia, no quería que estuviera muy lejos de Konoha y menos de algún hospital.

-¿Y usted Hinata-sama que hará?, si quiere puede quedarse un día más aquí....

-Yo... - fue interrumpida por el rubio.

-¡No!, ¡ella no se quedara se ira con nosotros por que estamos en una misión Dattebayo! - Dijo molesto el chico, cada vez que veía la cara de Toneri tenia ganas de darle un golpe en la cara. 

-Naruto no decidas por mi! - Decía algo molesta la ojiperla.

-¿Y bien que decides Hinata? - Volvió a preguntar Toneri.

-No, Toneri - Le dedico una mirada de enojo al rubio - No puedo porque estamos en una misión.

-Espero nos podamos ver pronto Hinata-sama - Le dedico una sonrisa a su amiga.

-Si, Toneri algún día volveré - Le sonrió la chica para después ir donde estaban su compañeros.

-¿Listo para irse? - Pregunto Sai apurado por querer volver a Konoha.

-Si, vamos.

-Adiós chicos, cuando quieran las puertas de la roca están abierta para ustedes - Sonrió el oji-blanco.

-Nos vemos - Dijeron todos los chicos menos Naruto para después ir al entrada de la aldea

-Bien vamonos - Hablo el líder de la misión mientras que le tomaba la mano a su novia y empezaban a caminar.

-Esta bien Dattebayo - Dejo a su novia de lado y empezó a caminar hacia la aldea de Konoha, en el camino Sai no dijo ninguna palabra, solo estaba preocupado de Ino, nunca supo en que momento se preocupaba por esa rubia y como de un momento a otro la felicidad que ellos tenían se habían desvanecido.

Naruto y Hinata no hablaron en todo el camino, cada uno estaba enojado a su manera, Naruto tenia una arranque de celos por el hecho de Toneri, le hacia arder la sangre al Uzumaki y cada vez que quería hablar con su novia se acordaba de lo sucedido y se volvía a enojar.

Mientras que Hinata no estaba tan enojada por lo sucedido, pero encontraba que era una perdida de tiempo estar enojada con el y más por lo que le estaba sucediendo. Ella cada vez que lo miraba para ver si podían arreglar las cosas encontraba la cara de enojo del rubio así que prefirió  no volver a armas otra pelea hasta que llegaran a Konoha a salvo.

Mientras que Sasuke con Sakura se encontraban tranquilo hablando principalmente de las aventura que había tenido el pelinegro fuera de Konoha, mientras que la pelirosa estaba atenta a cada palabra que decía el recordar cada hermosa facción de su pareja.

Ya era de noche y los chicos habían llegado a Konoha cansados para poder ir cada uno a su casa. 

-Llegamos chicos,  ire a donde el Hokage a hablar de la misión...nos vemos - Hablo Sasuke.

-¿Quieres que vaya contigo? - Dijo la pelirosa.

-No te preocupes anda a descansar, mañana nos vemos - Y como nunca el se acerco para darle un corto beso en los labios y dirigirse donde le Hokage .

-Iré donde Ino, nos vemos - Sin esperar la respuesta Sai se dirigio a la dirección contraria para poder ver a la rubia que tanto estaba esperando.

-¡Adios! - Dijo Naruto y Hinata al mismo tiempo y cada uno se fue para su lado. 

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En la habitación de Ino 

-Ino... deberías comer aunque sea solo un poco - Hablaba Kiba con la cuchara en sus manos, desde que estaba hospitalizada la rubia no ha querido comer ningún bocado. 

-...- La rubia no emitía ninguna palabra solo miraba el vació. 

-Por favor solo un bocado, me dijeron que si no comías te pondrían una sonda naso gástrica y no queremos eso - Hablo preocupado, el quería poder ayudar a la rubia.

-¿Ino? - Entro el pelinegro a la habitación de la rubia para encontrar que estaba con Kiba.

-¿Que haces aquí Sai? - Gruño Kiba.

-Vengo a ver a Ino - Dijo con una mirada seria.

-No es horario de visitas.

-Pues yo tengo permiso de Tsunade-sama para poder verla - Dijo sacando un papel firmado por la ex-hokage.

-Bien, estaré afuera uno minutos - Dijo enojado el Inuzuka.

El se enojo y le dio un portazo a la puerta de la Yamanaka.

-¿Ino? - Dijo acercándose a la chica que se encontraba pálida, sus ojeras estaban marcadas de un profundo morado oscuro.

-...- EL chico se acerco para sentarse en el borde de su cama y tomar su fría mano. 

-Ino, que te sucedió.... - Dijo acariciando la mano de la chica - ¿Haz comido algo?

-...-

-Ino responde... a mi igual me duele el hecho de perder a Shin - Su voz estaba triste, nunca lo había pensado como tal...su hijo - Desde que me dijiste eso nunca había pensado en la posibilidad de ser padre a la edad de 19 años, pero en el momento en el que me lo dijiste apareció algo en mi corazón que no puedo quitar porque quiero tener esa familia contigo Ino....