Bad Bitches (Nina,Luna y Ambar) (Editando)

Esta noche

Pov Ambar 

Siempre en las noches de fiesta me desaparecía, tenía la tendencia de perderme en el humo del cigarro y el alcohol sola en alguna vereda. Eso siempre molestaba a Luna y a Nina que amaban salir a bailar y perderse entre los chicos, yo era mas solitaria, aunque alguna que otra vez algun auto bonito pasaba enfrente de mi con unos ojos elegantes y me perdía también. Por ejemplo esta noche, me encontraba bebiendo una notella de whisky en la vereda de el club con un cigarro entre los dedos y un muchacho con rulos, una campera de cuero y un acento italiano me sedujo un buen rato, hasta que acepté escaparme con él en su coche... las luces de la costera, y el auto a oscuras nos embriagaron de lujuria, mis lagrimas chocando contra la ventana sin que aquel desconosido lo notara, ni siquiera quise preguntarle como se llamaba, por que no tenía intensión de volvermelo a cruzar, yo era de una sola noche, aún así el me lo dijo, al dejarme en la puerta del departamento que compartíamos con mis amigas... 

_Mi nombre es Matteo_ Susurró. Yo asentí con la mirada y luego abrí la puerta, dejándolo con la curiosidad de saber el nombre de esta chica triste.

Pov Nina

Me gustaban los chicos malos, esos que ni siquiera te miran cuando les bailas, esos que ni siquiera te preguntan lo que quieres, solo te toman, y se apoderan de tí... Por eso en las noches de fiesta, me gustaba bailar en las tarimas luego de pasarme de copas y buscar al que menos interesado esuviera en mí, para acercarme y seducirlo, me gustaba provocar, tener una noche y luego seguir mi vida. Los chicos que se enamoran de ti, solo causan problemas. Yo no estaba para eso, lo mío era disfrutar, beber y salir de fiesta con ellas. Pero esta noche, Ambar como siempre había desaparecido, o estaba sentada filosofando por ahí o en el auto de algun rico, Luna estaba bailando con unos muchachos mientras que yo, le bailaba a un chico que ni siquiera me prestaba atención, y entonces un muchacho con un jopo y una tonada cordobeza se acercó a mi.

_Sos muy linda para tratarte así_ Susurró. Yo levante una ceja indignada_ Me llamo Gastón_ Dijo sonriendo. Yo revolee los ojos.

_Bueno Gastón. Esfumate ¿Queres?_ Le respondí con una sonrisa altanera. El agacho su mirada sonriendo, era realmente guapo. Tomó mi mano y la besó.

_Espero volverte a ver chica loca_ Susurró y dió media vuelta.

_Yo no. Hasta nunca_ Dije riendo. ¿Quien se creía que era ese chico por favor? Yo hacia de mi cuerpo, lo que yo quería.

Pov Luna

Que lindo era sentirse deseada, acercarte a los chicos subiendo y bajando para que cuando crean que pueden tenerte, tu solo sonries y pegas media vuelta dejándolos ardientes de deseo. Eso me caracterizaba a mí, me gustaba ser el centro de atención, me gustaba que me desearan, me gustaba ser de todos, pero de ninguno, me gustaba dejarlos esperando, por que yo nunca volvía. Era extraño cuando aceptaba tener sexo con un chico o una chica ¿Quien sabe no?. Soy una persona libre, me gusta volar, me gusta jugar y perderme en la pista con un trago en la mano, bailando como si nadie estuviera a mi alrededor, solo yo las estrellas. Pero esa noche en la fiesta un rubio con ojos claros se encontraba junto a un morocho con una camisa, los dos me miraron y se acercaron para sacarme a bailar. Bailé en medio de los dos, los besé, ellos me besaron y luego quisieron más, mordí mis labios y los solté para alejarme moviendo sensualmente mis caderas.

_Me llamo Nico_ Dijo el rubio mordiéndo mi megilla.

_Yo me llamo Simón_ Dijo el de la camisa tocando mi cintura.

_¿Y tu eres?_ Dijeron a la vez. Sonreí.

_Yo... soy una chica mala_ Guiñé el ojo y desaparecí. Así funcionaba yo, y así me gustaba ser.