EL DESCUBRIMIENTO

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Estuve 3 horas investigando hasta que encontré algo. Era una noticia de hace 18 años que decía "mujer fue asesinada por su marido" y aparecía la foto de la casa en la que estábamos viviendo, busque más información sobre la noticia y decía que la mujer asesinada tenía 39 años y que la había matado en la habitación donde ahora estaba el cuarto de Elizabeth. Aterrada seguí pasando el articulo hacia abajo y aparecio la foto de la señora difunta, y era la misma que me había aparecido hace tan sólo unas horas en la sala de estar. Busqué en los artículos relacionados y había uno que decía "mujer se volvió loca luego de la muerte de su hija", lo abrí y reconocí a una persona en seguida, el padre de la familia de la foto era el mismo hombre que nos había vendido la casa. Seguí leyendo y aparecía el comentario del hombre diciendo "-mi mujer se volvió loca luego de la muerte de nuestra hija, decía -ella la mató, fue la mujer, fue ella, ella no se mató, nuestra hija no se mato- pero yo no le creía, sabía que estaba loca, sabía lo que le había causado la muerte de nuestra hija-", "-yo la amo pero esta loca y necesita ayuda-". Y haci continuaba, abajo estaban las pericias que decían que la niña había muerto tras tomarse todas las píldoras que encontró en el baño. Más abajo aparecía lo que la mujer había afirmado, decía que fue una tal Marta la que habia matado a su hija, entonces volví a la noticia anterior, me fijé como se llamaba la mujer muerta y si, se llamaba Marta. Sentí un dolor que invadía mi estómago, no quería que le pase lo mismo a Elizabeth, no lo permitiría, no sin antes luchar por ella, no sin antes entregar todo.
Cuando regresó Marcus le conté lo que pasó, no me quiso creer, fuimos a revisar las cámaras De vigilancia y aparecía sólo una cosa, yo. Aparecía como yo encendía el televisor y subía a la habitación me ponía a leer, como yo baje, apague la televisión y la volvi a prender, como me volvi a subir y volvi a bajar y hasta como me quedaba mirando fijamente la televisión sin que hubiera nada.
. -yo no recuerdo haberla prendido-dije
-yo no lo recuerdo porque no pasó Marcus- acente
. -¿esto es una broma acaso?-. Me preguntó
. -claro que no, te digo que yo la vi Marcus, yo la vi-. Respondí confundida.
. -esto no es ninguna broma Marcus, tengo miedo-.
. -¿me lo dices en serio? Respondió
. -no lo puedo creer, deja de jugar así, ¿que no lo ves? fuiste tu la que hizo todo, necesitas ayuda Ariadna-.
Nunca me llama por mi nombre, sólo cuando esta enojado, jamás creí que me trataría de loca, yo sabía bien lo que pasó, yo no estaba loca, no lo estaba. ¿o si?. No claro que no, yo estoy en toda cordura, se bien lo que pasó aquí.
Al día siguiente Marcus dijo que me ayudaría, ¿pero saben que?, me llevó a una clínica mental, creía que estaba loca, pero yo sabía exactamente lo que habia sucedido y nada lo cambiaría, ni siquiera un estudio mental, ni siquiera eso.
Entramos y el lugar era todo blanco, no me gustaba tanto blanco en un mismo lugar, me daba una sensación rara.
Me hicieron los análisis me los entregaron y adivine que, no tenía nada, yo estaba totalmente en toda mi cordura, me dio un poco de felicidad ya que dejaría callado a Marcus pero al mismo tiempo hubiese deseado que los resultados dieran positivos y todo fuera sólo parte de mi imaginación.
Volvimos a casa y Marcus se acostó a dormir, yo no lo podía hacer, tenía que descubrir que es lo que esa señora quería de nosotros. Volví a el Internet a ver los artículos de vuelta, tal vez encontraria algo de mi utilidad pero cuando encendía la computadora se escucho la risa de una chica, era como de una niña, pero no una niña pequeña, de una nena preadolesente, la risa venía de la habitación de mi hija, Fui a ver en cuanto lo sentí. Entre a la habitación estaba una niña mirando a Elizabeth, aunque se desvanecio rapidamente logre reconocerla, era la nena que se había matado en esta misma casa.
Inmediatamente tome a mi hija y la lleve a la habitación con Marcus, la recoste al lado de el y me fui a la habitación de Elizabeth, necesitaba saber que querían, porque aparecían. Estube alli hablando como por media hora sola intentando alguna respuesta pero no paso nada.
Pero ya sabía que debía hacer para que me respondan. Mandé a mi marido a visitar a sus padres junto con mi hija y que se quedarán ahí por dos días, mientras que yo buscaría algún lugar en donde conseguir una tabla ouija para comunicarme con la mujer.

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