3rd Day

59 4 0
                                    

Tras el concierto llego a mi apartamento, lo dejo todo por el suelo y me lanzo contra la cama. Abrazo fuerte mi almohada pensando en la conversación que he tenido horas antes con Zen, ya no me siento tan sola. Quizás incluso el hecho de haber contado lo que sentía me ha ayudado un poco.

-Saeyoung, solo espera un poco más. -sonrío pensando en él para dormir tranquilamente tras un largo tiempo trasnochando.

Un extraño ruido me despierta, los rayos solares impactan contra mi cara cegándome por unos segundos, giro mi cabeza evitando que el Sol vuelva a hacer de las suyas. Busco el origen del ruido para sorprenderme y ver que pertenece a mi móvil, alguien me está llamando.

-¿Si? -Balbuceo aún dormida.

-Oh, me alegra que contestes, llevo toda la mañana llamándote. Zen ya me dio tu número y me contó lo que ha pasado, lo siento mucho por ti, enserio. Quiero ayudarte con esto así que ¿Puedes venir esta tarde a mi casa y hablamos en persona?

-... ¿Yoosung?

-hehehe, se me olvidó decir que era yo. -contesta con una risa nerviosa. -Ven cuando puedas.

No entendía muy bien que está ocurriendo... ¿Yoosung? Vale, entiendo que quiera hablar conmigo, pero...

-Ni si quiera me has dicho dónde vives.

-¿Conoces la fuente grande? ¿Los edificios de detrás? Pues ahí. Verás fácilmente mi nombre... Me estoy quedando sin batería, nos vemos luego. -y colgó.

Aún sigo aturdida por la extraña conversación que acaba de ocurrir, por lo que iría a visitarlo después del trabajo. Una vez terminada mi jornada en mi nuevo trabajo recuerdo las indicaciones que Yoosung me dio para intentar encontrar su casa. Estoy en frente de los edificios pero no se cual es exactamente su casa. Tras un rato pensando que hacer decido buscar su número en el registro y llamarlo yo:

-... ¿Yoosung? Ya estoy en frente de los edificios que me dijiste, pero aún sigo sin saber cuál es tu casa.

Tras eso un chico rubio aparece en una de las ventanas de un tercer piso que me saluda con la mano. Tímidamente le devuelvo el saludo y me acerco a su ventana.

-Espera que te abro. -contesta para luego desaparecer. Un extraño y molesto pitido empieza a sonar, era la "alarma" que me indicaba que la puerta estaba abierta.

-Ya estoy dentro. -contesto avisando de que dejase de producir ese molesto ruido. Subo por el ascensor hasta el tercer piso y me encuentro a Yoosung en la puerta.

-Date prisa que reviviré enseguida. 

Esa frase me desconcierta por completo, no entiendo a qué se refiere pero lo sigo. Al entrar por la puerta veo que este se lanza a su ordenador, se coloca los cascos y vuelve a sumergirse en la partida de LOLOL que había dejado a medias.

-Yoosung... ¿No querías hablar conmigo? -pregunto mirando atentamente como juega.

-¡No, no, no! -gritaba mientras daba varios golpes en la mesa, a lo que no puede evitar sobresaltarme. 

Ha perdido su partida de LOLOL. Ambos quedamos unos segundos en silencio. A continuación el gamer  se quita los cascos suspirando fuerte. 

-Si hubiésemos tenido un tanque... Quizás... -habla para si solo.

-¡Yoosung! -exclamo su nombre esperando que esta vez me hiciese caso. 

-Oh, pensaba que habrías ido a la cocina a servirte algo. -contesta. Mira la pantalla del ordenador en la que se puede ver "derrota" en letras grandes, le lanza una mirada tenebrosa para volver a dirigirse a mí. -¿Cómo estás? -cambia radicalmente su gesto y tono de voz.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 19, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Promesa de reencuentroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora