Matrimonio Peligroso [TERMINADA]

Capitulo 10

Capítulo 10:

Era.... Justin... estaba...manoseando a Bárbara, su secretaria... ¡OH POR DIOS!¿ES QUE ACASO ESTE HOMBRE NO SE CANSA DE FOLLAR COMO UN CONEJO? Y Justin se dio cuenta que lo había visto TODO. Salí de su oficina corriendo y para mi suerte el elevador se estaba abriendo, llegue justo a tiempo, mientras Justin gritaba mi nombre y me decía; ¡nena, te lo puedo explicar! Si claro estúpido, accidentalmente tu lengua cayo dentro de la boca de ella y tu mano dentro de su entré pierna. ¡CÍNICO! 

Cuando salí del edificio, fui rápidamente a la casa, y empece a llorar, Justin trataba de llamarme pero le colgaba. Volvió a sonar el teléfono, e iba a volver a colgar, pero mire la pantalla, y no era Justin,sino ¡Ethan!

Le conteste.

-¡Ethan!

-Princesa¿cómo estas?

-Mal...

-Pues...eso esta por cambiar.

-¿Y eso?

-Porque... acabo de llegar a Seattle.

-¡Eso es grandioso!

-Entonces, ¿Qué tal si salimos?

-Me parece genial. ¿Estas en el aeropuerto?

-Si.

-Pues, te paso buscando.

-Dale, aquí te espero.

Salí de la casa, y me fui conduciendo en mi Land Rover. Cuando llegué al aeropuerto, me baje y fui a buscarla a la sala de espera. Y allí estaba, sentado con su cabello rubio, sus ojos azules y sonrisa perfecta, iba vestido con un smoking negro y camisa blanca, con zapatos negros, y llevaba un maleta, junto con un maletín de mano. Me acerqué a el.

-Hola sapo.

El se volteó sonriendo.

-¡Princesa! Dijo, mientras me alzaba y me daba vueltas.

-Te extrañado.

-Yo también,tonto.

-¿Cómo has estado?

-Mal... te lo explico en el camino.

Fuimos a mi carro, y en camino a su apartamento, le conté lo sucedido con Justin. Subimos a su apartamento, que estaba en el último piso de un edificio, que estaba casi en el centro de la ciudad.

-¡Vaya, nena!

-Lo se, me siento mal. Lo odio, no quiero volver a su casa.

-También es tu casa.

-No, es de él. Ya no la siento mía.

-Bueno...

-Lo se , lo se. Tengo que volver, porque no tengo a otro lugar que ir.

-Bue...

Lo interrumpí.

-Lo se, tengo que actuar como adulta. Pero la verdad, es que no quiero volver.

-Es..

-Lo s...

-¡Nena, cállate! Déjame hablar.

-Lo siento.

-Tranquila. Lo que te estaba tratando de decir, es que yo tengo la solución, para que no tengas que volver, te recuperes, y pienses todo con la cabeza fría....