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  "¡Traga, traga, traga, traga!" 

Un cúmulo de gente se había agrupado alrededor de alguien y no habían dejado de gritar aquello durante más de cinco minutos, llamando mi atención y la de Jungkook, quienes no teníamos ningún cliente que atender en esos momentos. 

  —¿Puedes ver algo? —le pregunté, poniéndome de puntillas en un intento fallido por descubrir qué pasaba.

  —Creo que están haciendo el reto del tonel.  

  —¿Y qué coño es eso? 

  —Ven. 

De un momento a otro, la cabeza del chico se encontraba entre mis piernas y yo sentada sobre sus hombros, aferrándome a su cabello para no perder el equilibrio y caerme. Desde aquí podía tener una vista perfecta de la fiesta y de lo que realmente estaba pasando en el interior del círculo; Mihua se encontraba tumbado junto a un gran tonel, con la boca bajo la canilla y tragando el chorro de alcohol que salía de esta. Todo el mundo lo animaban a seguir bebiendo y él, como buen borracho que era, cumplía las ordenes con gusto.

Estaba segura de que esa noche terminaría en un coma etílico. ¿Cómo podía ser tan idiota?

  —Jungkook, bájame. 

 —Adivino: es Mihua.

Asentí con la cabeza, bajándome torpemente de sus hombros. Sin embargo, él no parecía estar preocupado. Una leve sonrisa adornaba sus labios mientras observaba la fiesta, ya nadie parecía estar en sus cinco sentidos más que nosotros dos. 

   —Mihua es casi inmune al alcohol. Tiene que beber muchísimo para estar borracho de verdad, así que no te preocupes. No es la primera vez que hace algo así.

   —Lo dices como si fuese algo bueno. —fruncí el ceño, dibujando una mueca—.  No le ha pasado nada, hasta que le pase. Entonces todos os lamentaréis por no haberlo detenido en su momento.

  —¡¡Brookie!! 

Jin apareció con los brazos alzados y una sonrisa brillante en la cara, haciéndose paso entre las personas de la barra. Tras él, Hee Young iba subida en su espalda con las piernas rodeándole y prácticamente durmiendo; su cabello pegado a su rostro y la piel más pálida de lo normal, pero aún así seguía sosteniendo un porro casi consumido.

  —Vaya, el mejor hermano del mundo se ha acordado de su hermana. —ironicé al acercarme, cruzándome de brazos.

  —¡Te juro que te estaba buscando!

  —Qué raro, sabías que estaba aquí todo el tiempo. Tú y tu amiguito me hicisteis venir aquí.

  —Cállate, ¡¿no te has bebido nada en toda la noche?!

  —No, pero...

  —Ug, Jungkook, prepárale algo para que se relaje un rato. —se adelantó a decir sin dejarme terminar de hablar, rodando los ojos. 

  —Estoy de acuerdo contigo. —el nombrado no tardó en agarrar un gran vaso y preparar una de sus bebidas favoritas, cargándola de alcohol hasta el borde. 

 —¿Qué clase de hermano eres tú? 

 —No seas tonta, sólo me estoy preocupando por ti. ¡Deberías darme las gracias!

  —¿Por querer emborracharme? Esto es nuevo.

  —No es emborracharte, sólo es... alegrarte un poquito. ¡Bébetelo! 

  —Vamos, Brooke. ¿Qué hay de malo?  —el menor acercó el vaso a sus labios y dio un trago profundo, para segundos después llevarlos hasta los míos—. Sólo será este vaso.

Trillizos Park. - btsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora