Prefacio

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Entré a la pequeña cafetería. Para mi sorpresa, no estaba tan vacía como de costumbre. Caminé hasta la barra, pedí mi típico Caffé Mocha y me dirigí hacia una de las mesas, esperando a que alguien llevase mi pedido. 

Saqué mi libro de Biología y comencé a repasar. En 13 días sería mi examen, y no estaba en mi mente la idea de quedar a examen de nuevo.

Un empleado me trajo mi Mocha, rompiendo mi concentración.  En cuanto se fue, seguí leyendo, dando sorbos ocasionales. Ya casi pasaban 45 minutos, así que decidí regresar a casa. Me levanté de la mesa, guardé mi libro, mi cartuchera y mi cuadernola llena de apuntes, cogí la taza para llevarla hasta la barra, y en cuanto me dispuse a girar para llevarla, choqué con alguien.

"Bien hecho." – Solté sarcástico, sin siquiera mirarle. Me agaché rápidamente a levantar mi mochila, y los pedazos de porcelana de la taza.

"Lo lamento." – Dijo a la par de que se volvía al piso junto a mí, ayudándome con los trozos de la taza.

Levanté la mirada para ver quién era. Curiosamente, no lo conocía, extraño ya que Holmes Chapel era una pequeña ciudad, y todos nos conocíamos entre nosotros.


Es muy lindo, y aparentó ser simpático. Tengo qué saber quién es. Oh, Harry, eres una perra. Acabas de ver a este chico y ya estás fantaseando.

"No hay problema." contesté con un poco de vergüenza por como lo traté anteriormente. El chico terminó de juntar los trozos de la taza y me miró sonriente. Nos levantamos del suelo y llevamos los trozos hasta el mostrador, ni siquiera sé porqué de hecho, es decir, ¿de qué les serviría? No es como que la fuesen a pegar o algo, seguro compran más. Bueno, no importa realmente.

"Tendrás que pagar eso chico." dijo el cajero. Asentí, llevando mi mano derecha hasta el bolsillo de mi pantalón deportivo, pero el chico me tocó el brazo.

– Deja, yo lo pago, fue mi culpa.

– Oh, no es necesario.

– Igual. – le pagó a quien, según su placa, se llamaba Ernesto. – Por cierto, me llamo Louis.


Louis, ¡Louis! Genial. Ya sé quién es.

Oh Dios, me doy pena, ¿podría ser más patético? 

Solo por el verano. {Larry Stylinson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora