Parte 12

22 2 0
                                    

Inesperadamente llegaste y sonreíste, era una lástima que esas expresiones no fueran para mí.

No sabes lo que sentía por ti, como me hacías sentir, no sabes cuan feliz era con solo verte vivir.

Era una pena que tú ni te fijaras en mí; era una pena sentirme así hacía ti; realmente era una pena, que yo sí te podía hacer feliz, y desde aquí, no como él.

MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora