*A la mañana siguiente*
Sentía unos dedos suaves posados en mis mejillas dando tiernas caricias, una respiración tranquila pegaba en mi rostro, abrí lentamente mis ojos –Buenos días – Dije medio adormecido sonriendo, ella hacía lo mismo, quede observándola hasta que… esperen- ¡AAAAAAAAA!- Dije saliendo rápidamente de la cama – AAAAAAAAA – Grito ella divertida - ¿Quién diablos eres tú? – Dije algo asustado – Soy lo que tu dibujaste – Dijo sonriendo - ¿Lo que yo dibuje? ¿De que diablos hablas?- Pregunté confundido y viendo como ella tomaba un papel en sus manos desenvolviéndolo y entregándomelo – Yo soy ella – Dijo entregándome el papel con una sonrisa – Tú me dibujaste ¿Y que crees? Aquí estoy –Dijo riendo- E-Esto es imposible – Dije algo confundido- No, mírame –Dijo ella bajándose de mi cama- Ojos violetas, boca perfecta, nariz en punta y una hermosa sonrisa – Dijo sonriendo- No, tu no eres real, esto, esto es una fantasía – Dije retrocediendo- Hay dios, eres más tonto de lo que pensé- Dijo ella bufando- ¿Pero que haces aquí entonces?- Pregunte mirándola- Pues, siempre fui tu ángel guardián – Me dijo y la mire arqueando una ceja – Si como oíste, ¿Acaso crees que el día que te caíste desde el techo de tu casa a los 7 años y que no te haya pasado nada fueron poderes sobrenaturales tuyos? –Asentí- Aps, déjame decirte que no, yo fui, y la que te salvo el día que intentaste suicidarte también fui yo la que te salvo – Me dijo – Ahora comprendo todo – Le conteste- Vez, todo tiene sentido – Sonrió victoriosa- No, no todo ¿Por qué saliste de mi dibujo? – Le pregunte- Bueno, pues gane ser un humano, y ya que tu necesitabas algo que te salve me convertí en tu dibujo- Dijo sonriente – Esto es raro- Dije algo dudoso- Iré a darme una ducha, am métete en el armario – Le dije, ya que si mi madre la ve me matará - ¿Armario? ¿Qué es eso? – Me miro confundida - ¿No sabes lo que es? – Ella negó con la cabeza – Bueno, ven – La tome de la mano y la adentre al armario – Por nada en el mundo digas algo- Le dije cerrando la puerta – Okay Zayn- Esto era una gran locura, entre al baño y me di una larga ducha con agua caliente, esto solo me pasa a mí. Salí del baño y me puse la ropa que dejo mi mama en mi cama, suspiré y rápidamente salí de mi habitación cerrando la puerta con seguro. El día fue largo pero al fin estaba en mi casa, subí las escaleras exhausto y escuche como los resortes de mi cama rechinaban, ¿Pero que rayos? , al abrirla me encontré con la chica saltando sobre ella –Esto es divertido – Dijo saltando- Hey basta, ya – Dije haciendo que ella se siente - ¿Puedes comportarte? Mi madre podría oírte – Ella guardo silencio y asintió – Bien – Me senté junto a ella quitándome las zapatillas, suspire y ella me imitó, rasque mi nuca y ella me imitó, sonreí y ella hizo lo mismo – Bien, ¿Cómo te llamas?- Ella sonrío – Bien, me llamo ___ (Tn) – Sonreí por su acción – Eres extraña, jamás he conocido a alguien como tú- Ella me miro- Ese es el punto.