Narra Caitlin:
-MAMA, PAPA – grite –
Estaba entrando en desesperación, no sabia que le pasaba a _____, la tenía entre mis brazos, en eso entran mis padres y Christian a mi cuarto y me preguntan qué pasa, al ver a _____ así Christian la cargo y la llevo hasta el auto donde manejamos hasta el hospital más cercano, por emergencias, la llevaron para revisarla y de allí no nos dejaron pasar, estaba preocupada, mucho para decir verdad, pero se veía que Christian estaba más que eso, mi madre lloraba mientras mi padre la trataba de consolar, era como una hija para ella, recordé que no le había avisado a fredo y lo llame.
-Fredo? – dije dificultosamente cuando conteste –
- sí, que pasa cait? –respondió el – estas llorando? – pregunto –
- fredo, necesito que vengas al medical
-por qué? Que paso y a quién? – dijo preocupado –
- es _____ - sollocé – no sé qué le paso y no hemos sabido nada de ella
- ya voy para allá – dijo esto y colgó mi llamada –
15 minutos después estaba todo el equipo esperando por una noticia de aquella chica, los más preocupados eran Justin, Alfredo y scooter, a Caitlin la lograron dormir después de haber llorado tanto…
Narras tú:
Desperté en un lugar hermoso, lleno de árboles llenos de flores seguido de un gran campo con un sol radiante ese lugar tiene la palabra perfecta para describirlo: paraíso. Mire mi ropa y tenía un hermoso vestido blanco con flores, me percaté de que no tenía zapatos, apareció una luz de entre los árboles frondosos, de ellos aparecieron mis padres acercándose a mí pero antes de que ellos llegaran a mi yo corrí hacia ellos y los abrace, no sé dónde estaba, ni qué hora era, pero estaba más que feliz por poder estar una vez más con mis padres.
-los amo – susurre – los amo mucho – me sentía aquella niña de 13 años otra vez –
- y nosotros a ti mi amor – respondió mi madre – escúchame, no tenemos mucho tiempo – se separaron de mí.
- en el cielo amor – respondió mi padre, un escalofrío recorrió mi cuerpo – pero todavía no es tu hora princesa.
- primero queremos decirte que no estás sola – dijo mi madre –
- a que te refieres? – pregunte –
- a dos cosas – dijo mi padre – yo soy tu Ángel de la guarda.
- al igual que mama – supuse yo –
- no, yo no amor – respondió mi madre –
-entonces de quién? – dije yo –
- de tu hermana – dijo mi padre –
- pero soy hija única
- hija, hubo algo que te escondimos toda la vida – dijo mi madre –
- tienes una gemela – continuo mi padre – pero ella supuestamente había muerto a tus casi doce meses –
- pero que se supone que paso? – pregunte yo –
- cuando tú cumpliste 7 años – dijo mi madre – nos enteramos de que está viva, la raptaron cuando tuvo una fiebre y la estaban tratando.-
- solo hay una foto de las dos juntas, está en la caja con llave sobre el gabinete de la biblioteca.-
- pero si sabían que estaba viva por que no la buscaron? – dije yo –
- miedo – dijo mi madre haciendo una pausa– miedo a que te pasara algo, miedo a que nos dejaras de querer por ocultártelo, miedo, de que si la conseguíamos nos mataran. – se le notaba el pánico en sus ojos grises –
- que se supone que debo hacer? – pregunte procesando lo que me estaban diciendo –
- encontrarla – dijo mi padre tomando mis manos – disfrutar con ella lo que les queda – sus profundos ojos azules demostraban suplica – darse lo que nosotros no pudimos darles en vida.
- la conseguiré? – le pregunte en un susurro –
- déjaselo al destino – me susurro mi madre –
- como se llama? – le pregunte a mi padre –
- Emma – me respondió –
- y si el destino no está a mi lado? – se me cristalizaron los ojos –
- lo estará – dijo mi madre –
- donde esta ella? – una lágrima corrió por mi mejilla –
- más cerca de lo que crees – dijo mi madre -