n la escuela, antes del accidente – trague en seco – me hacían bullying por mis ojos – explique – me decían monstruo, rara, en algunos casos extraterrestre, me llamaban gorda, fea y hasta loca – me encogí de hombros – en esos tiempos, el único que me defendía y me consolaba era mi mejor amigo, él es de Irlanda pero estudiaba en Canadá, pocos meses antes del accidente tuvo que regresar a Irlanda y perdí contacto con él, sufrí mucho esos meses ya que estaba sola y no tenía quien me defendiera, cuando el accidente ocurrió, varios dejaron el bullying hacia mi mientras otros agregaban sobrenombres como “monstruo sin padres” o “la huérfana”, muchos quisieron ser mis amigos pero sabía que era por pura lastima, eso no duro mucho ya que me fui con Alfredo y él ya trabajaba con Justin y heme aquí – sonreí débilmente -
- oh hermanita lo sienta tanto – me abrazo– no te dejare ir nunca más, ¿okay? –
- okay – la abrace – muy bien – nos separamos – vayamos a vestirnos se hace tarde y los paparazis nos persiguen – reímos –
- está bien – sonrió –
Nos bañamos y nos vestimos con unos jeans oscuros, unas camisas (remeras, blusas) la de ella rosada y la mía morada que decían “twins forever” (gemelas por siempre) junto con un signo de infinito, unas vans animal print del color de las camisas, yo me puse la pulsera que me regalo Justin en mi cumpleaños. Planeábamos hacerles una broma a los chicos para ver si nos reconocían, las dos nos recogimos el pelo en una cola (coleta…) y bajamos a esperar a los chicos quienes aún no bajaban, sabrá Dios que están haciendo, abajo, nos encontramos con nuestros gatos y estos empezaron a maullar por falta de comida, los alimentamos y los chicos bajaron con cuatro skates pero se nos quedaron viendo confundidos, debieron haber visto sus caras.
-¿quién soy? – preguntamos al unisono, luego de unos minutos finalmente respondió uno –
- tu eres mi ___ - dijo Justin señalándome –
- ¿seguro? – pregunto Emma confundiéndolo –
- ehh bueno – se rasco el cuello –
- no, tu eres Emma – dijo Ryan – no soy tan estúpido, ____ lleva la pulsera que Justin le regalo el año pasado en su cumpleaños quieren confundirnos – nos miró desafiante, nosotras resoplamos –
- si tienes razón – dije yo –
- ¡me debes un helado! – dijo Emma –
-rayos – murmure –
- ¿Por qué le debes un helado? – pregunto Justin –
- porque apostamos a que Ryan no adivinaría quien era quien – hice una mueca –
- no soy tan estúpido – se hiso el ofendido –
- eso es lo que no sabemos hasta ahora – Emma le guiño el ojo –
- bueno ya vámonos antes de que fredo despierte – dije –
- ¿dónde se supone que van? – se escuchó una voz en el segundo piso –
- ¿a comer helados? – dije nerviosa, me había prohibido hacer skate por un accidente que tuve –
- falso, ya bajo – se escucharon pasos e inmediatamente escondimos los skates –
- ¿a dónde van? – pregunto fredo ya abajo con los brazos cruzados –
- a comer helado – dije tratando de sonar segura –
- sé que mientes _____ - me miro serio - ¿A dónde van? – pregunto lentamente y serio, yo bufe –
- ¿a dónde iban Emma? – la miro ella se puso nerviosa, claro, no estaba acostumbrada a las intimidantes miradas de Alfredo flores –
- al Starbucks – dijo nerviosa –
- ¿y luego? – levanto una ceja –
- a hacer skate – rio nerviosa y me miro –
- tu skate – me estiro su mano, al ver que yo no me movía insistió – tu skate – no respondí – si no me la das a las tres olvídate de tu laptop, uno, dos… – bufe, no la usaba mucho – y de tu teléfono – agrego, justo en el blanco, rayos, lo fulmine con la mirada, busque mi skate y se la entregue – muy bien, te dejo ir en bicicleta – se volteo para irse –
- pero no me gusta la bicicleta – reproche –
- ni modo – se encogió de hombros y fue hacia el estudio ya que estaba editando unas cosas –
- muy bien vámonos – tome mi bolso y me dirigí hacia la puerta pero ellos no me siguieron y me voltee – ¿Qué pasa? – pregunte –
- ¿Cómo iras tú? – pregunto torpemente Ryan –
- caminando – dije un poco obvia –
- si tú dices - agarraron los skates y caminaron conmigo, recordé que había una tienda de skates algo cerca de aquí así que me desvié hacia la tienda – ¿a dónde vas? – pregunto Justin –
- a la tienda de skates – sonreí –
- siempre tan terca – dijo Ryan negando con la cabeza –
- Emma, Emma - pase una mano por su cara –
- oh si lo siento, ¿Qué pasa? – me miro –
- no sé, estabas perdida (lela), ¿en qué pensabas? – continuamos caminando –
- es que, ese chico – señaló a un chico no muy lejos de nosotros – se me hace muy conocido, lo detalle bien y si, era cierto, pensé un poco y descubrí quien era –
- ¡claro! Es Christian – ella se quedó boquiabierta –
- es más alto en persona – me miro – mucho más alto – yo reí –
- sí, lo sé, chicos – ellos me miraron – Emma quiere conocer a Christian – lo señale – allá – ellos bufaron –
- vamos Emma – dijeron los dos y se dirigieron hacia Christian mientras yo me dirigí a la tienda, compre mi skate y fui hacia ellos –
- hola Chris – se veía confundido – ¿Qué pasa?
- ¿Por qué veo doble? – mire a las chicos quienes reían animadamente y bufe –
- Chris ella es mi gemela Emma, Emma él es Christian – los presente –
- pero… ¿cómo? – me pregunto –
- larga historia, - Emma respondió por mí – resumido, hermanas perdidas – sonrió –
- ahora hay dos de ustedes, como las diferenciare?!!
- fíjate en los ojos, son diferentes – dije –
- son iguales – bufo – solo que están en diferentes posiciones – hicimos un gesto obvio – ah.
- tonto – dije – ¿vamos por un café? Quiero ir al Starbucks.
- okay – dijeron al unisono –
- chicos – me dirigí hacia Ryan y Justin - ¿vamos al Starbucks? -
- pero yo no sé hacer skate –intervino Emma –
- Ryan quédate con Emma nosotros les traeremos lo que quieren – ellos asintieron – ¿qué vas a querer Emma? – le pregunte –
- lo que tu pidas está bien – me sonrió – presiento que lo que pidas me gustara – reímos –
- está bien, ya volvemos – dicho esto Chris, Justin y yo nos dirigimos al Starbucks –
