CAPITULO II

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NARRA L.B

Tucker se levantó de su cama para irse a asear para terminar arreglándose e ir al Instituto, entro al baño y se colocó frente del espejo que queda en el lavamanos "que apuesto soy" bien narcista, tomo su cepillo de dientes y la barra de pasta, puso un poco en el cepillo y empezó a cepillar su blancos y perfectos dientes "tan blancos y hermosos como yo" se los enjuaga y se lava la cara, sale del baño y va a su armario para buscar la tropa que usaría para ir a clases

Encontrando así unos hermosos Jeans blancos ajustados y una camiseta de UV gris y rayas blancas, combinándolos con unos converse negros con blancos, sacándose los lentes y poniéndose lentillas para agudizar su visión y no utilizar esas molestosas gafas "mm mejor, me voy sin ella" tomo la decisión de no ir con su amada gorra de color roja que no combinaba para nada con su atuendo, se bañó de colonia dándole un agradable olor varonil y también dulce muy dulce, perfecta para la ocasión "perfecto"

Salió de su cuarto, bajo las escaleras muy sonriente, el rico olor a perfume llego a las fosas nasales de su dulce madre -emm que rico hule y no me refiero a mis hotkakes- le sonríe

-lo tomare como un cumplido- le sonríe -buen día ma- se acerca y le besa en la mejilla

-buen día cariño...siéntate ya está listo el desayuno- Tucker hizo lo que su madre le pidió

-que rico huele- entro el padre del joven -buen día cariño- le da un beso en los labios a su esposa -valla- dice al ver como su hijo esta vestido

-buen día papá- le sonríe

-veo que quieres causar buena impresión a alguien- ríe a carcajadas

-puede ser- comenta con una medio sonrisa maliciosa, los tres empiezan a reír a carcajadas por el comentario del menor empezando así su desayuno.

Salió de su casa con una sonrisa reluciente, fue directo a la prepa ya que sus amados amigos le habían informado que irían junto con sus parejas ya que se habían quedado a dormir con ellas, el no tuvo más remedio que aceptar ya que el solo es un simple amigo y tras eso soltero, no tiene pareja, ni siquiera un amante, solo un idiota que rompe su palabra para irse a follar con quien sabe quién en quién sabe dónde "haaah" agitó su cabeza para no pensar en eso

Hoy seria un día en que le aria entender a ese idiota que con él no se juega y menos le dejan plantado, se lamentaría en haber cancelado SU noche de pasión y peor aún ÉL había hecho la cita "que idiota" tal vez cree que es el único a quien tiene para darse un revolcón un día de semana u los otros dos días bah ya sabrá, a pesar de que vista y actúe de forma menos seductora en el colé, no quiere decir que es menos cool y que puede tener a chicas u chicos a sus pies.

Sin darse cuenta llega a la prepa, va directo a su casillero ignorando las miradas sorprendidas, curiosas y con interés de los adolescentes. Con una sonrisa ladina camino con elegancia hacia su casillero, abriéndolo seductoramente dejando a chicas y chicos muy interesados en él.

Después de sacar y meter libros en su casillero, lo cierra, mira a su alrededor y ve a algunas chicas lanzarle miradas coquetas, sonríe de lado.

Como vio que sus amigos no se dignaban a llegar, fue al salón de clases a esperarlos allá. Entrando y capturando todas las miradas, no les tomo importancia y fue a su asiento, sentándose con elegancia y llamando mucho la atención

-¿quién es ese?- escucho decir a lo lejos

-quien sabe- dijo con interés

Tucker sonrió con satisfacción, reaccionaron como él quería y como había sospechado.

-Tu-Tucker?- Gira a ver a su amigo quien lo vía sorprendido

-hola Danny...Dash- les sonríe

Danny se acercó a él y se sentó a su lado seguido por Dash quien le miraba con una ceja alzada -explica- exigió Danny sabiendo que su amigo se traía algo de manos

No Es AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora