Capitulo 2

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Luego de una larga semana en el instituto el fin de semana al fin había llegado. Debía buscar a papa o a Nicklaus para ver que trabajo me tocaba hoy.

-Oh aquí estas- William se encontraba en el sofá, aunque mi padre tenía 45 años, estaba muy bien físicamente. Luego de la muerte de mi madre el entro prácticamente en depresión, nos costó mucho lograr que siga adelante, debía hacerlo, por todos nosotros. Siempre pienso en mi madre y la cruel forma en la que abandono este mundo, ella no se merecía eso.

-Papa, ¿Qué tengo que hacer hoy?

-Solo debes lograr que Berni nos pague los 250 mil dólares que nos debe.

-Está bien, en el lugar de siempre ¿verdad?

-Sí, princesa.

Bese su mejilla y fui a la cochera, me monte en la Hummer H3 negra, debería cruzar la cuidad y eso me tomara unos 45 minutos. Hay veces en las que pienso que no me hubiera gustado nacer en la familia que me toco, solo por lo que debemos hacer, pero jamás cambiaría a mi bella familia. Años hace que murió mi mama, en frente de mis ojos, llevo estos tres años intentando descubrir quién fue el idiota en dispararle a la única mujer de la familia que no se metía en estas cosas. Siempre trate de alejarla a ella y a los mellizos lo máximo que puedo, aunque algunas veces necesito la ayuda de mis hermanos.

Cuando divise el almacén de Berni a nos 1000 metros apague los faros, así no se percataban de que yo venía. Aparque 100 metros antes, entre los árboles. Tomé mi pistola calibre 22 y me dirigí a la parte de atrás, la puerta estaba abierta, sabe que estoy aquí.

-Emma, querida-el hombre cincuentón se acercó a mi

-Berni- hice un leve asentimiento acompañado del saludo. Guardé mi pistola en mi espalda.

- ¿Qué te trae por aquí? - dice haciéndose el desentendido

-Sabes perfectamente que hago aquí-bufé. Algo planeaba, lo noté ya que no vi a sus hombres custodiándolo.

-Oh si, el dinero- aunque dijo eso no hizo ningún movimiento.

- ¿Y bien? ¿Dónde está?.

-Eres muy preguntona Emma- detrás de mi pude sentir la presencia de varios hombres. Me limite a mirar sobre mi hombro. 8 de sus hombres me rodeaban y él me miraba de afuera, sentí como uno tomaba mi pistola y la arrojaba en algún lugar.

-Bien Emma no quiero pagarle más a tu padre, decidí hacer un cambio de planes y tú eres parte de ellos. Este es el trato. Te daré la oportunidad de irte si logras vencer a mis hombres, pero si no lo logras deberás quedarte aquí, te doy una oportunidad.

Todos avanzaron a mí. Tome 3 cuchillos de mi bota y se los lance a tres de ellos que automáticamente se desplomaron en el suelo, me descuide por lo cual el morocho me dio en la espalda, me gire y le pegue en su zona y cuando quedo a la altura de mi torso le pegue con mi rodilla haciendo que se cayera. El otro alto me dio en mi costilla derecha y me pego en la pierna, dejándome caer. Entre los 4 me pateaban, cada vez sentía más dolor. Vi el cuerpo de uno de los tipos que mate con el cuchillo, trate de agarrarlo sin que ellos se percaten, y lo logre. Cuando uno de ellos inclino su pierna, rápidamente le corte el musculo llegando al hueso, pego un grito ensordecedor. Aproveche ese segundo de distracción para incorporarme y clavarle entre las costillas el cuchillo a otro, voltee y los únicos 2 sobrevivientes me miraban. Lance el cuchillo ensangrentado directo en su corazón, al instante estaba el cuerpo sin vida en mis pies. Quedábamos nosotros dos, él se acercó, tiro un gancho derecho, pero lo esquivé y le di en las costillas el levanto su pierna y me pateo haciéndome tambalear, pero rápidamente me compuse, comencé a dar ganchos por todo su cuerpo hasta que vi su cuerpo inconsciente en el piso. Busque a Berni con la mirada, pero ya no estaba.

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