Vampira enamorada

Capítulo 1

Narra Alessa
Hola me llamó Alessa y soy una...vampira diurna, se preguntaran ¿Qué es eso?
    Un vampiro diurno es aquel que puede salir a la luz del día sin convertirse en ceniza.

Comenzare en cómo me convertí en vampira.

Un día como cualquiera me voy a estudiar a la biblioteca como de costumbre y sin darme cuenta de la hora salgo tarde, mi casa no estaba tan  lejos de la biblioteca, cuando estoy en la puerta veo a Leo esperándome --Que hacia el aquí creí que cuando habíamos terminado no se acercaría a mi, a pesar de que se que en la forma que le termine no fue la correcta sólo se lo dije en la cabina de radio del colegio yo no sabía que el micrófono estaba prendido y que todo el colegio escuchara, al final me termino odiando -- cuando ya estaba frente a el comenzó a hablar.

-Hola Alessa..a los tiempos.
-Ho-Hola Leo creí que nunca me ibas a dirigir la palabra...ya sabes después de eso.
-Lo pensé y se que no es tu culpa, queria verte podemos platicar.
-Pe-Pero voy a llegar tarde a mi casa.
-Podemos ir platicando mientras vamos hasta tu casa.

Habíamos estado conversando en cómo nos va en el colegio, después la atmósfera se sintió rara, Leo me arrastro hacia un callejón y me empujo hacia la pared. 

-Leo ¿Que-Qué haces? Aléjate por fa... 

-Alessa tranquila... acaso olvidaste cuando hiciste pedazo mi orgullo.

Es enserio, si no estuviera en la situación en la que me encuentro hubiera estado discutiendo sobre su pensamiento machista.

-Leo...creí que ya te habias olvidado de eso, tu sabes que no fue mi inten...

-¡Cállate maldita sea! Sali contigo solo porque hice una apuesta...jajaja..pero jamas creí que me terminarías.

Que esperaba que hiciera al verlo besándose con otra chica, quería que lo aplaudidos al veces pareciera que los hombres no tuvieran cerebro; aunque me dolió que me dijera que había hecho una apuesta estaba más asustada por el horrible momento.

De repente Leo se estaba acercando hacia mi cuello --La verdad hay veces que no entiendo a los hombres dice que me odia y ahora esta a punto de besarme el cuello-- pero siento como la respiración de Leo se esta agitando, pareciera que esta luchando contra algo.

-Leo..¿estas bien?

-Alessa..Alessa deseo tu sangre.

-¿Que? Leo estas en drogas ¿Mi sangre?....bueno si es que quieres que la done te digo que soy de tipo B.

-No Alessa... perdoname.

No entendía la razón del por que estaba pidiéndome perdón, hasta que sentí como algo puntiagudo se introducía a través de mi cuello y sentía como perdía fuerza.

-Leo es que..acaso me estas..mordiendo.

Leo no respondía,luego de unos minuto sentí como caía hacia el suelo y veía como Leo escapaba y me dejaba tirada.

(...)
Desperté y mis padres se encontraban alrededor mio.

-¿Qué ha pasado? -les pregunto a mis padres.

De repente todo lo que había pasado invade mi cabeza, recuerdo como Leo se comportaba raro y como me..había ¿mordido?

-Hija... uno de los vecinos te encontró tirada en un callejón y te trajo hasta aquí-dijo mi mamá que estaba despeinada me imagino que sera por la preocupación.

-Lo siento mama.. necesito descansar.. déjenme sola por favor

Mis padres se fueron despidiéndose de mi con un beso en la frente,cuando se fueron trate de no pensar en Leo solo quera dormir.

Me levanté asustada, toda la noche había tenido pesadillas diferentes en las que asesinaba a mi familia y donde estaba manchada de sangre, al mirarme al espejo me sentía rara veía como mis labios estaban rojos y por alguna razón me sentía con mas energía, baje a tomar desayuno junto con mis padres.

-Hija que bueno que te despiertas, te estoy preparando el desayuno -dijo mamá preparándome unos huevos revueltos con café.

-Ya me tengo que ir al trabajo ¡Cuídense!-dijo mi papá despidiéndose.

-Cuídate Víctor y ven temprano para la cena- le dijo mi mamá a mi papá.

Mamá y yo desayunamos juntas como de costumbre y luego me fui a mi cuarto a estudiar y a repasar todos los temas de la clase. Cuando ya era noche me sentía rara sentía mucha sed pero por más que tomaba varios litros de agua me sentía sedienta, les dije a mis padres que no tenía hambre; subí a mi cuarto y traté de dormir.
Me desperté en la madrugada sedienta estaba rara no podía controlar mis pensamientos parecía como si alguien me estuviera controlando, fui a la nevera a tomar agua pero no la quería y de repente aparecio Titan mi perro chihuahua --¿Qué es lo que me pasa? Por que de pronto puedo sentir el olor de la sangre de mi...¿perro?-- había perdido todos los sentidos y sólo quería morder a mi perro y chupar su sangre, sentia como mis colmillos...¿Colmillos?..me habían aparecido colmillos, me acercaban a mi perro y lo mordí a pesar de que el ladraba y luchaba para que lo soltara pero no podía detenerme era algo inevitable, no pare hasta que sentí que mi perro había muerto...No podía creer que había asesinado a mi perro quería sentirme triste y odiarme por asesinar a mi perro, pero me sentía fantástica. Estaba toda repleta de sangre y escucho unos pasos acercándose y como la luz se apodera de toda mi cocina.

-¡Ahhh!...¿¡Que ha pasado aquí!?- dice mamá viendo aterrada a Titan de pronto su mirada se dirige hacia mi- ¿Alessa? ¿Eres tu?

-Ma..Mamá ayúdame no se que me pasa no entiendo como sucedi...-le dije llorando a mí mamá que al parecer me miraba con ojos llenos de miedo, papá me interrumpió.

-Alessa ¿Por que estas llena de sangre?-dijo papá mirándome confundido.

-Ella no es Alessa... ¡Ella es un monstruo!¡NO ES MI HIJA ALESSA, ES UN DEMONIO! -gritó mamá haciendo se aquellas palabras fueran como cuchillos directo a mi corazón.

-No mamá soy tu hi...
-Ni te acerques a mi o te juro que te asesinare monstruo.
-Mamá... papá soy yo su hija Alessa.
-No, tu no eres Alessa así que lárgate.

Me fui deambulando por la calle sin saber a donde ir, de pronto estoy en un bosque con mi ropa llena de sangre.

-¡Alguien ayúdeme por favor!- dije gritando esperando respuesta, me sentía sola y triste ademas me sentia debil.

Mientras voy caminando a lo lejos veo a unas sombras acercándose a mi y de repente pierdo la conciencia.