Mi Verdadero Amor

Capitulo 01 Experimentando

Dazai, era un niño muy curioso y gracias a esa curiosidad vio cómo su tutor tenía relaciones sexuales con Hirotsu, y como él chico que estaba entrando en la pubertad quería experimentar aquello que había visto con su lindo compañero de cuarto

-Vamos Chuuya, ¿no te entra esa curiosidad de saber, que se siente hacer ese tipo de cosas? —Decía el castaño a su compañero de cuarto.

-No, y aún si tuviera esa misma curiosidad que tú tienes, yo no sabría que hacer —Contesto el menor serio.

-Y si yo te enseño ¿aceptarías estar conmigo? —Pregunto el mayor emocionado.

-No sé... Además ¿cómo me enseñaras si tú tampoco sabes algo como eso? —Cuestiono el menor.

-Como si no me conocieras, —sonrío el castaño— Yo, ya averigüe como se hace ese tipo de cosas, ahora solo quiero llevarlo a la práctica —Tomo al menor por la cintura acercándolo a su cuerpo.

-¿Eh? Sí averiguaste algo como eso, sabes que eso solo se puede hacer entre un hombre y una mujer ¿Cierto? —Defendió el menor mirando a su compañero a los ojos.

-En eso te equivocas Chuuya, también se puede entre dos hombres y entre dos mujeres, o eso fue lo que investigue —Respondió el castaño sin apartar por un segundo sus ojos castaños de los zafiro de su compañero.

-Dazai, solo búscate una novia o una chica para hacer tus cosas y ya déjame en paz —Esbozo el menor apartándose bruscamente del mayor.

-No, Chuuya yo quiero que mi primera vez sea contigo, así, en caso de que algo salga mal, solo quedaría entre los dos ¿entiendes verdad? —Cuestiono el castaño

-Bien... tu solo dime que tengo que hacer y ya está —Contesto Chuuya de manera un poco decidida, claro que no estaba seguro de eso, pero sabía que si no cumplía con la petición de su compañero este solo iba a molestarlo tal vez por días.

-Claro que te diré, —Dijo Dazai abrazando al pelirrojo —Vas a ver que te gustara —Susurro en su oído.

El menor no dijo nada, solo se dejó abrazar por el mayor el cual empezaba a dar pequeños besos por su cuello haciendo que su cuerpo se sintiera raro, con cuidado se agarró de la camisa de Dazai mientras mandaba su cabeza hacia atrás para que él mayor tuviera más que besar

La temperatura de sus cuerpos iba aumentando a medida que él castaño acariciaba y besaba el cuerpo del menor, con cuidado Dazai empezó a desabrochar los botones de la camisa del pelirrojo cuando consiguió su cometido se la quitó y la dejó caer al pisó empezando a besar cada sección de su abdomen

-Da-Dazai me siento raro —Jadeo el menor

-Relájate y solo disfruta —Gruño el mayor

El castaño continuó con los besos en el abdomen del menor, mordió, lamió, succiono y besó sus dos pezones hasta dejarlos duros, continuó besando y bajando por el cuerpo del menor hasta llegar a la parte baja, la cual aún estaba protegida por sus pantalones y ropa interior, con sumo cuidado desabrocho la hebilla de la correa y los botones del pantalón

-Da-Dazai pa-para —Dijo el menor tomando del cabello al castaño.

-Chuuya no puedo dejarte así —Pronunció el castaño mientras tomaba el miembro del pelirrojo y lo llevaba a su boca para darle una pequeña lamida en su glande.

- Ah... — Salió de los labios del menor al sentir como la lengua de su compañero recorría cada parte de su miembro, debía admitir que le gustaba lo que él castaño hacía en su parte íntima, que sin notarlo empezó a mover sus caderas haciendo que su miembro entrara más a la boca de Dazai, el cual gustoso no dejaba de chuparlo y lamerlo — Da-Dazai... Qui-quiero... ¡Ah! — El éxtasis que Dazai le proporcionaba al chupar tan exquisitamente su miembro, como si fuera todo un profesional, no lo dejaba pensar con coherencia.

-No... Te... pre...o...cu...pes —Contesto Dazai entre cada chupada que le daba al miembro del menor, él sabía muy bien que él pelirrojo estaba por correrse así que empezó hacer sus chupadas mucho más rápidas, haciendo que él menor jadeara con mayor intensidad y moviera mucho más rápido sus cadera para así terminar corriéndose por primera vez en la boca del mayor, el cual trago todo aquel líquido seminal.

La respiración del menor era pesada, su rostro estaba completamente rojo, de sus labios un pequeño chorro de saliva caí por la comisura de los mismos y sus piernas no aguantaron más haciéndolo caer en los brazos del mayor, el cual lo atrapó y lo llevo a la cama

-Aún no hemos terminado Chuuya —Dijo el mayor mientras se deshacía de cada una de sus prendas.

-Yo... no creo poder aguantar más —Contesto el menor.

-Tranquilo aquí solo yo, haré el trabajo —Contesto el castaño acomodándose en medio de las piernas del menor, y llevándose dos de sus dedos a la boca los lubrico con su propia saliva.

-Dazai ¿qué harás? —Cuestiono el menor mirando al mayor un tanto intrigado y asustado.

-Nada malo —Contesto el mayor dándole un pequeño besó en la frente — Tú, solo relájate — susurro mientras que con sus dedos le daba pequeñas caricias a la entrada del menor para acto seguido meter uno de sus dedos en la estrecha entrada del menor haciendo que este de un grito de dolor.

-Dazai... para... —Pidió al sentir el segundo dedo en su interior, le dolía bastante el tener aquellos largos dedos metidos en su trasero, que hacían un movimiento de tijeras para que su virgen entrada cediera más.

-Perdóname Chuuya —Susurro el castaño mientras sacaba sus dedos de su interior y de una sola estocada introdujo su miembro en la entrada del menor, haciéndolo dar un grito aún más fuerte que el anterior, ganándose así un par de rasguños en su espalda.

-Sácalo, eso duele —Pidió con sus ojos apretados mientras que finas lágrimas brotaban de su interior.

-No puedo... —Dijo para luego empezar a moverse de manera suave, mientras besaba sutilmente los ojos del menor para poder secar aquellas lágrimas.

-Para... ya no quiero —Decía, no, más bien suplicaba el menor.

-Te prometo que acabaré rápido Chuuya —Dijo el castaño moviéndose más rápido, sin pensarlo toco un punto en el interior del menor el cual lo hizo gemir de placer y repitiendo ese mismo movimiento logro que él pelirrojo olvidará un poco el dolor y disfrutará del acto que estaban llevando acabó.

-Da-Dazai mas... mas... —Pedía entre jadeos el menor, el mayor sin perder oportunidad alguna se movía más rápido en su interior, hasta que consiguió liberar todo su líquido seminal, llenando así al menor, el cual tuvo su segundo orgasmo a los pocos segundos.

Con cuidado Dazai salió del interior del menor y sé dejó caer totalmente cansado al lado del mismo que al igual que él trataba de regular su respiración, el cansancio por el acto ocurrido minutos atrás atrapó a Chuuya el cual se quedó dormido plácidamente, el castaño lo abrigo con una de las cobijas y dándole un pequeño besó en la frente se acomodó en su propia cama

-Gracias Chuuya —Susurro y los pocos segundos cayó dormido.

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