Vecinos (Nash Grier y tú)

Tº1-Capitulo18

Capítulo 18:
Apuesta, cumplida.

A las tres de la mañana llego Michelle con su peluche, me movió un poco y me pido si podía dormir conmigo, acelere y después de un rato volví a caer dormida junto a mi hermanita. Siete de la mañana y nuevamente sonó mi alarma, unos brazos rodeaban mi cadera, extraño. Michelle no tiene los brazos fuertes y menos grandes, abrí mis ojos y encontré a Nash abrazándome, sonriente como siempre.

-Hola- dije estirándome.

-Buenos días- dijo sonriendo.

-¿Qué haces aquí?¿Dónde esta Michelle?

-Digamos que hicimos un trato- dijo sonriendo.

-¿Cuál?

-Le daba dulces a cambio de que me dejara dormir contigo hoy- dijo besando mis labios.

-Eres un pillo- dije riendo.

-Admítelo, te gustó despertar conmigo- dijo sonriendo.

-Me encanta- dije sonriente.

Nash se puso sobre mi y me besaba, desesperadamente, me deje llevar.

-Hey- grito Michelle- eso no era parte del trato, merezco más dulces.

Nash dejo mis labios y fijo la mirada a mi dulce hermanita, yo, seguía acostada y Nash arriba mío.

-Ya, vallan moviéndose que se hace tarde- grito mi mamá subiendo la escalera.

-¿Sabe ella que estas aquí?- le pregunte a Nash.

-No- dijo asustado.

-Mamá- grito Michelle, de seguro iba a decir que Nash estaba en casa.

-Esta bien, cuando vuelva te doy el doble de dulces- mi hermana sonrió- ¿trato?

-¡Si!- dijo ella saltando.

-Genial- respondió mi novio, nos levantamos de la cama y empuje a Nash al baño, mientras hacia como su buscara la ropa del colegio.

-Buenos días- dijo mamá entrando a mi cuarto.

-Hola- dije sin mirarla.

-Hoy llevare yo a Michelle, tu puedes irte con Sara ya que ella se demora como tu.

-Si mamá, que les valla bien- dije dándole un beso en la mejilla y salió de mi cuarto.

Saqué mi uniforme limpio y lo deje sobre la cama, me quite mi ropa y me envolví en la toalla para después entrar al baño.

-Hola- escuche la voz de Nash.

-Tonto- dije pegándole- se me había olvidado que estabas aquí.

-Mh, me parece que tomaremos una ducha juntos- dijo sonriente.

-No lo creas, eso no pasará ahora.

-Vamos, una duchita corta- dijo sonriendo pícaramente mientras me acorralaba entre la puerta y su cuerpo.

-Nash...

No me escuchaba, sólo se acercaba más y más, nuestros cuerpos estaban pegados, sus manos estaban en mi cintura y sus labios sobre los míos.

-Nashty...- dije entre un beso- debo bañarme y de seguro tu madre debe de preguntarse donde estas.

-Te salvas- me dijo- nos vemos en clases- dijo abriendo la puerta del baño.

Lo seguí con la mirada, vi que salía por mi ventana, saltaba por el tejado y entraba a su ventana, al llegar volvió su vista a mi y guiñó su ojo.