Desde el día en que te ví

Sentimientos ocultos

Hola, mi nombre es Valeria. No soy la típica niña especial, solo una chica de cabello castaño y largo (muy largo) y ojos marrones, y bueno, si es un dato relevante, tengo quince años.

Mi vida era muy tranquila, vivía en una ciudad donde conocía muchas personas, pero me mudé a otro lugar donde comenzaría un nuevo colegio, y debería conocer nuevos amigos, lo cual no sabría si iba a ser fácil .

Por mucho que rogué  que las vacaciones durarán más, ya que no quería enfrentarme a un cambio de colegio, mis peticiones fueron en vano. Bueno, al fin debería aceptarlo, solo faltaban 5 días para el comienzo de mi infierno.

En  fin, llegó el lunes, tarde unos minutos para levantarme de la cama, (después de sonar el despertador) no quería ni pensar que mi pesadilla estaría por comenzar. Pero igual me preparé y partí hacia el colegio con mis padres. No parecía un lugar aterrador, ("no al menos por fuera ") , ellos se quedaron hablando con la directora, mientras yo estaba sentada en una banqueta al lado de la puerta principal.

Y ahí fue como comenzó todo, mientras esperaba a mis padres, los cuales no estaban al tardar, me entretuve en el teléfono, hasta que vi pasar a un niño bello, rubio, de ojos claros y piel brillante, (seguro que se imaginaron un principe azul), pero tan solo era un niño de 6 años como máximo, lo que en verdad me llamó la atención fue, que para ser tan pequeño venía solo (algo que yo jamás hice con esa edad) pero al fin, termine olvidándolo.

Después de unos minutos sonó el timbre para entrar a clases, mis padres debieron marcharse y yo permanecería un rato más en La Oficina.

Un momento más tarde de que todos estuvieran en clases, alguien golpeó la puerta de La Oficina, aunque no es de creer, mi piel se erizo y me puse pálida y roja a la vez, mi corazón se detuvo por un segundo y mis ojos brillaban, no sé si por  asombro o nerviosismo, era un chico, pero no cualquiera, era alguien que había hecho que mi estómago estuviera cosquilleando y no pudiera parar de temblar. Sentí en ese momento que me quería morir, sin saber por qué . Me enfoqué tanto en sus ojos, (no eran los más bellos, solo un poco más claros los míos ), pero tenían algo especial, algo que jamás había visto. Su pelo era entre rubio y castaño (si, ya han de imaginarse, que confuso) y su estatura solo un poco más alto que yo, no había mucha diferencia.

Creo que se dió cuenta que lo observaba , cuando caminó cerca de mi, me miró fijamente y sonrío,
solo bajé mi cabeza e intente disimular con mi teléfono, lo nerviosa que estaba.

Ese día fue terrible, entré mucho más tarde a las clases de lo que pensaba , sólo pude ver el último periodo, que duraría 2 horas.

Al día siguiente, no me quería levantar, primero por perezosa , y segundo porque temía encontrarlo otra vez y que se acordara de lo sucedido, sería el peor día si eso pasaba, rogaba quedarme, pero mi mamá no paraba de decir :

- Vale(así me llaman en casa) se hace tarde y es tu segundo día, no puedes faltar, ya debes acostumbrarte.
A lo que tenía que responder con un

- ok mami

Cuando estuve en el colegio, que por mala suerte llegue más temprano que nadie, me acerqué a una pared y esperé que ya pudiéramos entrar a clases, lo que jamás imaginé, fue que en mi primer periodo iba a estar él. Solo de verlo me puse nerviosa, lo único que se me ocurrió fue poner una excusa y salir al baño, donde no entendía que me pasaba, mi corazón, no paraba de latir, parecía que iba a salirse de mi pequeño pecho. Solo me quedé pensando un rato y  pregunté en mi mente

- pero que te pasa vale ?, que te sucede con él, es el segundo día, solo contrólate !!!

Aunque al mismo tiempo  solo deseaba salir como si nada y presentarme, tener la valentía de hablarle  y que el tiempo parara para mí.

Lo que sucedía era algo que jamás había sentido en 15 años, era maravilloso y aterrador a la vez, algo muy extraño.

Al fin decidí volver como si nada, la profesora me había asignado un asiento que quedaba en la último, al menos esta vez tenía la suerte de que él se sentaba al principio.

El miedo, de que me reconociera me invadía, así que trataba de cubrirme la cara con el cabello,que es bastante largo como ya había  dicho. Solo pensaba pasar a la siguiente materia.

-Al fin acabó el día!!!( Dije en mi mente, mientras suspiraba )

O bueno eso era lo que creía, hasta que camine a la salida, y vi esos ojos incomparables, que hacen que explote , los cuales se acercaban a mí entonces...........

Continuará