Julia camina por el prado, sus pies tocan el frío pasto. No sabe lo que pasa, sabe cómo se siente, pero no sabe por qué.
Camina tanto tiempo que se siente como mil agujas clavadas en sus pies. La sangre comienza a brotar, se puede sentir el miedo. Se respira la angustia. Sus sentidos están alerta. Siente la presencia del peligro.
Comienza a correr, la sangre no para de salir.
Corre más rápido, el frío se siente en los huesos.
Ya no puedes esconderte, te atrapare y te desgarrare.
Oh, pequeña Julia, debiste correr.
ESTÁS LEYENDO
Los cuentos de Lilly Bell
Truyện NgắnDonde Lilly Bell cuenta historias que le contaron.