Me he levantado ya con el pie izquierdo, sin ganas de salir de la cama. Tao vez porque he dormido mal esta noche, porque no he dejado de imaginar realidades que no existen. A veces juego a pensar en qué hubiese pasado si aquel abrazo no hubiese sido el último, en los besos que no nos dimos o en los que aún, a día de hoy, quiero darte. Me da por imaginarme cerca de tus dudas, y pensar que todo seria diferente, que esta vez los problemas serían en quien duerme a la izquierda de la cama y no quien se siente sol@ cuando todavía somos dos. Quizá todavía te pienso porque no pensarte seria aceptar que ya no estas, y no se si quiero enfrentarme a una realidad en la que ya no seamos dos, aunque hacia mucho tiempo que ya solo eramos un uno más uno. Pero eso era suficiente contigo. Preferiría ser infeliz contigo a feliz con otr@, a feliz sola, porque me asusta estar conmigo misma, por si descubro algo que no me gusta, porque nunca me ha gustado nada que tenga que ver conmigo, porque todavía no he sido capaz de conocerme, por si me fallo, porque siempre rompo todo lo que toco, y me da miedo romperme más, aunque este completamente rota. Supongo que hoy es uno de esos días que no puedo más, que todo me duele. imcluso aquellas heridas que estaban cerradas, bien cerradas, sin ninguna posibilidad de volver a sangrar, pero hoy todo es distinto. Y no porque hoy sea un día especial, no porque haya una nota en mi calendario que diga que hoy debo estar triste. Pero lo estoy, y ni si quiera yo se el porque. Supongo que cuando estamos mal sin aparente motivo es porque nos sobran heridas abiertas o porque nos faltan cojones de cerrarlas y ser felices de una pta vez, porque la felicidad nos da miedo, por si viene la tristeza, por si dejamos de sonreír, sin pararnos a pensar que estamos teniendo miedo a perder algo que aún no es nuestro, que vivimos en eterna tristeza por miedo a dejar de ser felices, cuando en realidad ni si quiera lo somos. No somos más que muertos en vida, que preferimos morir de recuerdos a vivir los momento que tenemos delante de nuestras narices, que nos resulta más fácil decir que nuestra vida es una mierda a levantarte y romper con todo lo que nos hace daño, porque nos hemos acostumbrado al dolor, porque quien mejor nos daña somos nosotros mismos, porque nuestro monstruo no duerme bajo la cama, sino a nuestro lado, porque somos nuestro peor enemigo y vivimos con miedo a que nos hagan daño y nos estamos destrozando solos, porque la felicidad es para valientes y no somos más que una panda de cobardes. Y es una lástima, porque tenemos una sonrisa al lado de la esquina, pero no tenemos ganas de andar, somos más de esperar que pasen cosas, y pasa, pasa la vida, y no nos damos cuenta. Ojala no sea tarde cuando dedicamos a abrir los ojos y empezar a vivir, ojala ese día no estemos ya completamente muertos, y solos, por miedo a la soledad....