Dulce Hermia,
otoño unido en primavera
a la luz de luna.
Séquito de fantasía prisionera
ahondado a la lluvia de fanales;
un manantial de elecciones para los amantes.
Obsequio de hadas,
que profundo cede a través del agua
donde la flor suspira figuras grabadas.
Se designan los festejos;
en tanto, los senderos son trazados
por las mariposas presentes
y pétalos del amanecer.
El candor de las palomas, duerme allí;
contiguo a la trompeta baja,
de los ritos de Atenas.
Las arañas tejedoras
de cifradas esperanzas,
arrancan lágrimas del semblante adusto.
Hermia, tan hermosa
como la noche empapada del rocío...
duerme allí.
En tanto, la flor mágica
vierte su encanto,
y se desenvuelve el capricho del amor.
*
Abril 24, 2017
© 2017 Gabriela Ponce de León, La Dama Azul. Todos los derechos reservados.
ESTÁS LEYENDO
Mercurio negro
PoetryConcursando en #premiosperlados2018 La poesía es tan sólo un simulacro, elemento del acto; en tanto del alma logra liberarse en formas libélulas, trazando piruetas en el viento. © La Dama Azul.