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Nathanäel se encontraba en la cocina de aquella inmensa ''Casa'' cofcofmasióncofcof(?) Preparando la cena para cuando llegase su Amo. Claro que éste, antes de irse al colegio le ordenó que hicieses su labores.

«Debes lavar, planchar y doblar mi ropa, no olvides ordenar mi habitación y preparar algo para cenar.»

Y claro, no pudo faltar lo más importante, una condición común;

«Quiero que hagas todo eso, con sólo un delantal. Nada de ropa interior.»

Y él, sólo atinó a asentir de forma sumisa.

En la situación en la que se encontraba, no diría que fuese o fue sometido por el rubio, para nada, es algo que por alguna razón deseó, deseó estar ahí para el entretenimiento del Agreste.

Inclusive de forma sexual.

No le molestaba para nada, aún recordaba la primera vez que comenzó aquella simple atracción, porque vamos ¿Qué aparte de atracción sexual no sería esto? No había sentimientos de por medio, cariño u otras cosas como el amor, tan sólo... Llenar un vacío.

Sí, porque eso era Nathanäel para Adrien.

Un simple... Entretenimiento.

—Llegué.

Una voz le sacó de sus pensamientos, Nathanäel sintió como unos brazos le abrazaban por detrás rápidamente, sonrió.

—Bienvenido, Amo. — Dijo Nathanäel sin voltear a ver a Adrien, éste último sonrío al ver que el pelirrojo acató sus órdenes, vistiendo sólo un delantal verde con un tomate en el centro y atado a su cintura.

—Oh, eso huele bien. — Comentó el rubio en tono pícaro.

—Sí, estará lista en unos minutos. — Aclaró el pelirrojo, aún sin voltearse.

—Me refería a ti... — El rubio susurró cerca de su oído causándole un escalofrío.

—¿S-sí? — Nathanäel sintió cómo unas manos traviesas se colaban entre el delantal tocando directamente sus pezones. — Ngh...

—Qué tierno... — Adrien lamió el lóbulo de la oreja de Nathanäel sintiéndolo estremecer por completo.


[I'm in here for your Entertaiment.]



—A-ahh... — Nathanäel sentía aquellos tres dedos moviéndose de manera frenética en su interior mientras que Adrien sentía cómo los apresaba de vez en cuando. Su interior estaba húmedo y cálido, las ganas de entrar en él se intensificaban y sus apretados pantalones ya le molestaban.

Con rapidez bajó la cremallera de su pantalón y de una estocada entró en Nathanäel provocando que soltase un gemido agudo.

Adrien en vez de tomarlo por las caderas le abrazó y comenzó con las rapidaz embestidas, Nathanäel sentía aquellos brazos apresarle de forma posesiva según él y eso no evitó que sintiese una extraña felicidad.

—Tú... Eres mío. — El rubio susurró en su oído nuevamente entre jadeos, Nathanäel inconscientemente ante eso apretó sus paredes internas.

¿Ser suyo? Ah, claro... Se refería a cuerpo, no de alma ni sentimientos, esas cosas sobraba en su extraña relación sexual.

Sintió una corriente eléctrica en su espina dorsal cuando Adrien se corrió en su interior y Nathanäel igual.

El de ojos esmeraldas le dio vuelta a su ''juguete'' encarándole, empujó un poco al menor para que quedase apoyado en el mesón de la cocina y tomó sus caderas, elevándolo un poco.

Luego, volvió a penetrarlo.

—¡A-ahh! — Nathanäel se aferró fuertemente a la chaqueta blanca del mayor, arrugando la tela tras apretar sus dedos en el proceso, embistiendo aquél dulce punto en su interior.

Adrien lo veía fijamente y con intensidad, Nathanäel mantenía sus ojos cerrados mientras trataba de contener pequeñas lágrimas, sus mejillas teñidas de un carmesí intenso... Se veía adorable.

El rubio se acercó a su cara lentamente, el pelirrojo abrió sus ojos tras sentir un cálido aliento pegar contra su rostro y después...

Después sintió aquella presión en sus labios.

Adrien le estaba besando.

Y ellos nunca se habían besado, ni siquiera en el inicio de todo...

Los labios del Agreste se movieron rápidamente, pasando su lengua por los acorazonados labios del otro pidiéndole permiso para entrar cosa que el menor no se negó. Sentía la hábil lengua del rubio explorando toda su cavidad, rozando ambas lenguas de vez en cuando, mientras que Nathanäel sentía que le faltaba el aire.

Cuando se separaron, ambos ya habían llegado al orgasmo, con un hilo de saliva aún uniendo sus bocas.

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Madi re-subiendo sus weas desde tiempos inmemorables. :n

For your Entertaiment → AdriNathDonde viven las historias. Descúbrelo ahora