Un día de estos las autoras estaban en el patio cuando vieron a Felixiano.
Lo primero que hicieron fue gritar pero después se sorprendieron ya que era pleno invierno y él iba con su camiseta de tirantes comprada en el mercadillo como las de nuestro amigo Maikol.
Nosotras empezamos a seguirle hasta que llegó al aseo, las autoras, sigilosamente entramos y vimos a Felixiano cagar escuchando k-pop.Felixiano se da cuenta y nos mira con cara de asombro. Y dice "¿Alguna de vosotras tiene una chaqueta? ¡¡Es que me estoy quedando helao!!"
Las autoras miramos su piel y estaba erizado, nos pusimos todos a llorar porque nadie tenía una chaqueta. Entonces a Felixiano se le ocurrió una idea...
-¡¡Ya está!! Me quedaré aquí todo el tiempo cagando hasta que finalicen las clases.
Las autoras se pusieron de acuerdo y salieron. Cuando salieron escucharon a Felixiano maullar, estábamos muy tristes porque lo estaba pasando mal. Entonces a una de ella se le ocurrió una idea:
-¡Vamos a preguntar a Maikol si tiene una de sobra!
Fuimos hacia Maikol, y allí estaba... Vendiendo sus chaquetas a 2€ el color. Fuimos corriendo y le compramos una de color roja.
Fuimos al aseo y Felixiano nos dio las gracias, terminó de cagar y todos nos pusimos a bailar.
Con la historia de hoy hemos aprendido que se está quedando helao.
N/A: desde aquí saludos a Maikol, gracias por vendernos chaquetas a 2€ el color 🎶💓
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LAS HISTORIAS DE FELIXIANO
Historia CortaLas increíbles historias y sin sentido de este pequeño personaje, que tiene mucha vida que contar...