Amor Bandido (KenJin)

Capitulo Final

El eco del disparo resonó haciendo alertar al castaño. La vista fue como de primera fila en un estreno de película, lo vio todo. Le habían disparado a JaeHwan justo en el pecho. y tal cual cámara lenta le proporcionara la imagen mas horrorosa de su vida, vio como JaeHwan caía al suelo empapado en su propia sangre.

-¡Noooo! - Jin corrió lo más rápido que pudo a lado de Jae, pero el guardaespaldas que su padre le puso intento detenerlo tomándolo de los brazos. Un golpe con el codo en el estomago basto para deshacerse de su verdugo y correr a lado de JaeHwan.

-¡Alto ahí! - dijo otro hombre apuntando con un arma al que había disparado primero, pero el tiempo escaseaba en ese momento, no había tiempo para pensar y mucho menos para dialogar.

Otro disparo más ensordeció el tímpano de los presentes y otro cuerpo más cayo mutilado, un disparo certero en la cabeza cegó la vida de TaekWoon simultáneamente.

Ambos amigos yacían en el suelo, uno moribundo y el otro muerto.

-Mi amor, no, no te mueras, ¡no me dejes! - Suplicaba Jin, de rodillas sollozando abrazando la mitad del cuerpo de JaeHwan bañado en sangre lo cual no le importo - ¡alguien, ayúdeme, por favor! - levanto la voz al mismo tiempo que buscaba con la mirada quien lo socorriera

Ken abrió los ojos y con las pocas fuerzas que le quedaban, ya no había más tiempo, levanto a cuestas la mano e hizo que el castaño lo mirase callándolo.

-Te amo, J-jin - balbuceo apenas audible - nunca lo olvides...

-No JaeHwan, no te despidas, no cuando aun no te he demostrado cuanto te amo, por favor, no me dejes solo, yo sin ti no tengo nada en este mundo, ¡por favor...no me dejes!- Ken limpio las lagrimas de sus mejillas para al fin cerrar los ojos - Noo, ¡Maldición que alguien me ayude! - chillo apretujando la cabeza de JaeHwan.

Nunca tuvo mas miedo a perder a alguien y mucho menos a una parte de su vida, porque después de JaeHwan su vida ya no tendría sentido.

-Buenos días - dijo el doctor entrando a la sala donde Ken se encontraba en observación

-Buenos días doctor - respondió el policía que custodiaba al rubio

-Por favor, me deja a solas con el paciente - pidió

-Claro que sí, doctor, con permiso - dijo el uniformado para luego salir de la habitación

El doctor, con el barbijo cubriendole la cara, espero a que el policía cerrara la puerta por completo para por fin hablar con Ken que se encontraba en un estado crítico debido a que la bala impacto muy cerca de su corazón. Sus ojos se nublaron al ver a Ken, postrado sobre esa cama, conectado a una sonda, un respirador artificial y ese aparato que no dejaba de hacer pi, pi, pi

-Señor Lee, señor Lee ¿me escucha? - lo mecio levemente para despertarlo

Lentamente JaeHwan abrió los ojos reconociendo esa cabellera castaña y esos ojos marrones que tanto amaba, solo que ahora aquellos ojos estaban completamente rojos e hinchados. ¿acaso murió? ¿estaba en el cielo? No, estaba vivo y su ángel estaba a su lado, sonriendo con aquellos lindos labios gruesos para él.

No, no estaba soñando, era Jin y estaba junto a él. Quizo hablar, moverse, se toco por si lo estaba imaginando, intento decir algo pero no podía hacerlo, el respirador se lo impedía.