Capítulo 4

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Libra

¡Escuela de mierda! Ya nos hicieron hacer un trabajo. Para Matemáticas, más encima. Me tocó con puros hombres menos con mi amor platónico que es casi mi novio. Mierda... me tocó con Escorpio, Acuario y Sagitario. Al menos, ellos me caen bien. Aún no conozco a los demás bien pero hay un chico que me mira mucho. Que se llama Andrés. Creo. Es lindo y todo pero... estoy casi empezando con Aries y no voy a echar todo por la borda.

Por fin llegaron. Dijeron que mi casa porque estaba al medio de las otras. Son tan tontos pero chistosos.

- Ya me iba a quedar dormida. ¿Qué te dijeron tus papás por lo de anoche?

- Me retaron y me castigaron pero me escaparé igual. No me gusta vivir encerrado - dice Sagitario.

- Ah. Aww si está tan grande - digo con voz tierna y lo abrazo - Ya, entra.

- Entro - dice él.

- Hola, guapo - le digo a Escorpio.

- Hola, guapa - sonríe coqueto y me abraza.

- Recuerda a Piscis.

- Déjame - besa mi mejilla y entra.

- Hola, recipiente con agua - me levanta mientras me abraza.

- Hola, Libreta - acaricia mi espalda. Me suelta y entra a la casa.

(...)

- Suéltame. Tengo novio - digo saliendo de sus brazos.

- ¿Y a mí qué me importa? Linda, sígamos.

- No quiero. Suéltame - tocan la puerta.

¡Bien! ¡Salvada por la puerta! Corro a abrir y veo a mi casi novio... Aries...

- Hola, hermosa - me abraza contento y le da un beso a mi cuello - Emm... ¿por qué estás sola con él? - dice un poco celoso.

- Quiso ayudarme a terminar el trabajo... pero no te preocupes. No pasa nada. De hecho, ya se iba. ¿Cierto?

- Sí - dice él - adiós, Aries - se dan la mano mientras Aries sonríe un poco más tranquilo - Adiós, Librita - le da un beso a mi mejilla y se va. Yo lo miro como se va y Aries me mira serio de inmediato.

- ¿Estás celoso?

- No, preciosa, para nada - sonríe.

- Estás celoso. Se te nota en los ojos - digo mirándolo con los ojos casi cerrados y sonriendo.

- Que no estoy celoso, mujer.

- Ya. No te voy a creer pero no tengo ganas de discutir.

- Que milagro - dice un poco cabreado.

- Uuy. Parece que no te tocó anoche - digo con una sonrisa - A propósito, ¿cómo estás?

- Bien gracias, enana, ¿y tú?

- Bien.

Escorpio

Llego a mi casa cansado. Muuy cansado. Nunca hago algo así que me canso por todo. Es chistoso.

- ¡Escorpio! - dice mamá entrando a mi cuarto enojada - ¡Cómo es posible que no hayas hecho tu cuarto aún! ¡Flojo de mierda!

- ¿O sea que tú me hiciste con mierda?

Mala idea. Empezó a golpearme molesta con su cinturón.

- ¡Papá, mamá me está golpeando! - digo arrodillado en el piso con las lágrimas casi saliendo por mis ojos.

Papá llega y le quita el cinturón mientras discuten. Ellos se van de mi cuarto y yo me encierro mientras dejo otro desorden aún mayor en mi cuarto mientras lloro. Ella es la culpable de mis problemas de emocionales. Por culpa de ella no vivo bien. Si fuera por mí, viviría sólo con papá pero claro, ellos aún se aman y me molestan a mí con que tengo sexo con todas siendo que cuando seponen al día, no me dejan dormir. Cuando eso pasa, yo me escapo por la ventana e iba a ver a mis antiguos amigos que siempre fueron una mierda conmigo. Ellos me hicieron la persona que soy ahora pero antes era peor. Antes consumía drogas. Le hice a todo pero a ¡todo! Fue la peor experiencia de mi vida.

- Ya no quiero más - digo llorando en el piso a más no poder.

Cuando voy a hacer el primer corte en mi brazo, tocan la puerta. Me guardo la navaja y abro la puerta para ver la hermosa chica que me sonreía.

- Hola, Escorpio, se te... - me mira - ¿qué te pasó? - dice preocupada y me abraza.

- No quiero más - me lanzo llorando a sus brazos.

Lo único que pude hacer fue abrazarla con fuerza. Ella acariciaba mi cabello mientras yo lloraba sin poder detenerme.

- Tranquilo. Llora, no te preocupes.

- ¡¿Y tú?! ¡Deja de dar lástima! - me grita mamá sacando a la hermosa chica de ahí y encerrándonos en mi cuarto para darme otra paliza.

Ya sin poder aguantarlo más, salto por la ventana, dobládome el pie al caer. La hermosa chica llega a mi lado y me ayuda a correr hasta su casa para luego entrar. Sus padres estaban ahí y se preocuparon mucho al verme así.

- Hija, ve por el botiquín. Rápido - ella sube al segundo piso. Minutos más tarde, ella baja con una cajita en sus manos.

- Toma, mamá - se lo recibe y ella empieza a hacerle curaciones a mi pie herido.

.....

- ¿Cómo te sientes? - dice acariciando mi mejilla con su pequeña mano.

- Sin ganas de vivir.

- No digas eso. Tienes toda una vida por delante. Eres guapo, inteligente, cariñoso, eres simpático, un poco simpotico pero... - sonrío pero me vuelvo a poner serio de nuevo - Escorpio, si quieres, puedes venir a vivirte conmigo, con mi familia.

- Sí, Escorpio, sólo debes perdirlo.

- No creo que sea verdad.

- Escorpio, el ambiente de esa casa te está matando. Hasta yo me sentí un poco mal cuando entré. Tus papás te tratan como si tuvieras 2 años y estás muy cerca de cumplir los 18. Vente a vivir aquí. Te lo suplico - dice tierna.

Jamás creí que esta chica se interesara tanto en mí, sobretodo con el novio sobreprotector que tiene. Tiene mucha suerte al estar con ella.

- ¿Usted está de acuerdo con esto? - digo mirando a su mamá.

- Por supuesto que sí - dice sonriendo.

- ¿Y si yo le dijera que quiero denunciar a mis padres, también estaría de acuerdo?

- Pero, hijo, yo...

- Yo sí. Te acompañaría a hacerlo, si quieres.

- Hija...

- Mamá, tú sabes que odio las injusticias y... no para que los encarcelen, obviamente, sino que al menos para que esté emancipado. ¿O no? - me mira.

- Sí - acaricio su mejilla y sus padres se miran con una sonrisa.

- ¡¿Entonces te quedas?! - dice contenta.

- Si quieres.

- ¡Entonces se queda! - salta encima mío y me abraza con fuerza.

- Hija, suéltalo - se aparta.

- Perdón - sonríe tímida.

¡¿Quién será la chica con la que Esocrpio se irá a vivir?! ¡Sigan con la siguiente parte! ¡Yujuu!

Campamento Zodiacal ~ 2° Temporada ~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora