The Girl On My Mind

10. Estos días son raros

-Estem... ¿Estas segura? ¿No te vas a sentir incómoda?

-No creo, supongo que eres buena persona, so...

-Emmm bueno no sé, déjame acomodar las cosas para acostarme en el piso.- Dije moviendo la cama un poco para lograr sacar la cama que había debajo, para acostarme allí.

-¿Anthony?

-Dime.

-No quiero molestarte así que si quieres puedes dormir conmigo.

Literalmente ya había levantado un poco la cama para moverla y la solté tan de repente que resonó por toda la casa. Hasta Pers entró super adormilada con una almohada a preguntar que había pasado. Cuando se fue, Avril comenzó a reírse de una forma muy tierna.

-Oye, yo sé que no estoy super buena, pero tampoco tenias que reaccionar así.- Dijo entre risas y con un ligero rubor por el tiempo pasado.

-El problema es que si estas buena coño.- Dije acostándome en mi cama tapándome con mi almohada de dinosaurio (Si, tengo muchas almohadas de animales)

-Hay gente que dice lo contrario.- Dijo ella sentándose a mi lado un poco alejada.

-Los ciegos y los que tienen problemas mentales, seguramente.

Comenzó a reírse aunque en un momento me doy cuenta que se escuchan sollozos y me quito la almohada de la cara para verla llorando.

-Él nunca me lo dijo, y me hubiera gustado que lo hiciera.- Dijo susurrando y abrazando sus piernas.

Yo me levanté rápido y como no sabia que hacer sin abrazarla, le di a mi querido Coco, un oso de peluche marrón que tengo desde bebé.

-Eh Eh, el te va a hacer sentir mejor, agárralo.- Dije viéndola sonrojado. Era la primera vez que alguien lo agarraba ademas de Percia y mis padres. Mierda logró ponerme nervioso.

-Es muy cute.- Dijo abrazándolo y sonriendo un poco.

Yo estaba que quería quitárselo y abrazar a Coco mirándola feo, pero se vería muy infantil, así que al final no hice nada.

Seguimos hablando pero yo trataba de evitar cualquier cosa que tuviera que ver con ella y su "novio" extraño.

Comencé a hablarle sobre mi infancia, y como Percia se hizo mi mejor amiga luego de que le rompiera un juguete por molestarme con que no podía correr más que ella. Y que al golpearme por eso nos llevaron a detención y yo comencé a ver que era buena persona y así. Hasta que unos cuantos años después sentí que me había enamorado de ella, y por eso comenzó a alejarse de mi hasta que se fue del país. Pero volvió hace dos años y volvimos a estar como antes. Y bueno, ahora solo siento una gran amistad por ella, igual que ella conmigo, aunque a veces peleemos porque no puedo superar a alguna chica y ella me moleste por eso.

Avril se reía cada vez que yo decía como Percia me caía a golpes y yo no podía hacerle nada.

-Yo nunca he tenido un mejor amigo, siempre me he sentido rara con los chicos porque siempre han querido tener algo conmigo.- Dijo ella con una especie de melancolía que me hacia querer abrazarla.

-No te voy a mentir, con lo hermosa que eres es entendible que quieran algo.- Dije riendo y acostándome otra vez.

Ella hizo lo mismo a mi lado y viendo al techo.

-Pero no es normal que sea siempre. Por cierto, me gusta la música que tienes.- Dijo viendo una lista que tenia en mi pared.

Esa lista es de mis canciones favoritas, y siempre agrego alguna nueva todos los días, me encantan un montón de canciones.