Parte 5

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Una vez a solas y después de asegurarse de poner el cerrojo, Minseok miro a Kai, con la clara intención de salirse con la suya, fuera como fuera.

-Kai, tengo una última petición para ti. -Habló Minseok -Si quieres que te perdone del todo hoy tienes que dejarme ser activo. Siempre he sido pasivo y tengo curiosidad.

-¡¿Qué?! -Gritó horrorizado Kai. Minseok juraba que estaba tan pálido que ahora sí que era una réplica de Taemin -¿No podemos hablarlo?

-No, yo quiero ser activo.

-Pero... ¿Y si te gusta? ¿Seré yo el pasivo siempre?

-No, de vez en cuando solamente.

-Es que yo... ¡No quiero hyung! -Gritó asustado, jamás fue pasivo. Minseok suspiró y pensó en una táctica que de seguro funcionaba con Kai.

-Bueno, entonces tendré que pedírselo a Luhan; él con tal de tenerme en su cama...

-¡¡No!! -Dijo asustado -Seré el pasivo, hyung pero...

-Pero...

-Sé cuidadoso... Yo jamás he sido pasivo...

Minseok sonrió enternecido y asintió, por supuesto que tendría cuidado, ya supuso que alguien como Kai no había sido jamás pasivo de alguien. Se alegraba de tener ese privilegio, sería la persona que conseguiría que Kai fuera pasivo, se sentía orgulloso tanto de sí mismo como de Kai que al final terminó aceptando.

Kai se sentía nervioso, como si fuera a tener sexo por primera vez en su vida. Le dolería, eso lo sabía, y le asustaba ese hecho, pero confiaba en su hyung para que hiciera el acto lo más placentero posible.

Así fue como Minseok, decidido, se acercó más a Kai y le besó pegando ambos cuerpos por completo mientras cada uno se entregaba a la pasión. Kai, un poco indeciso, pasó sus brazos por el cuello de Minseok y este los posó en la cintura del moreno pegándola a la suya haciendo que ambos jadearan en medio del beso. Separaron sus labios unos segundos para volver a juntarlos inmediatamente, pasando sus lenguas por sus labios y dentro de sus bocas, saboreándose.

Entre besos, los dos chicos caminaron hasta la cama donde el moreno se tumbó dejando a Minseok arriba siguiendo con los besos que cada vez eran más lujuriosos. Minseok tenía ganas de saber cómo se sentía dominar a alguien como Kai.

Dejó los labios del moreno para pasar por su cuello dando pequeños besos en la zona y lamidas mientras Kai gemía bajito dejándose hacer por el mayor. Kai pasó sus manos por el cuello de Minseok otra vez y fue bajándolas poco a poco por la espalda acariciándole y movió su cuello dejándolo más expuesto para Minseok. El mayor sonrió al notar eso y comenzó a dejar marcas en la parte inferior del cuello y pequeñas mordidas.

A Kai se le hacía extraño no ser el que dominara y tener que dejarse hacer, pero Minseok lo estaba haciendo genial y por alguna razón, de momento, le gustaba como iba todo. Minseok desabrochó la camisa de Kai por completo y poco a poco, con cuidado de no romper ningún botón por las prisas, mientras sus labios besaban el torso del moreno que jadeaba.

Kai, que no se iba a quedar atrás, le retiró rápidamente la camiseta al mayor dejándole ver su trabajado cuerpo. Si era sincero, Minseok actualmente se había hecho no solo más guapo, sino más masculino. De pronto gimió cuando sintió algo húmedo en uno de sus pezones, el derecho, viendo que Minseok se lo estaba lamiendo y chupando. Gimió otra vez sacándole una pervertida sonrisa a Minseok que ahora se lo mordía con cuidado.

El otro pezón que se encontraba abandonado comenzó a ser atendido por una de las manos de Minseok que lo apretaban y retorcían haciendo que Kai arqueara la espalda gimiendo de placer.

A la altura (xiukai)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora