- ¿Qué sucede? – pregunto Myungsoo, mientras ingresaba atrás mío
- Tengo un invitado ya en casa - mencione mientras me giraba para mirarlo – creo que hoy no podre invitarte a quedarte unos minutos...
- Vaya vaya... Kim Myugsoo... no sabía que eras tan cercano a mi esposa – menciono Woohyun mientras se dirigía a nosotros – lo siento por lo de hoy, creí que eras un escritor y no solo un fotógrafo – sonrió
- Myugsoo gracias por traerme, nos vemos mañana – lo sujete del brazo para sacarlo de casa lo más antes posible
- Quiero hablar con él – menciono Woohyun
- Es mi invitado y ya se va – respondí
- Es de mala educación sacar a un invitado sin apenas dejarlo entrar dos pasos a casa – le lance una mirada de disgusto
- No te preocupes – menciono Myungsoo mostrándome una sonrisa – con su permiso Nam Woohyun, fue un gusto acompañar a su esposa a casa – con una leve reverencia salió de casa
Cerré la puerta y me gire para enfrentar a Woohyun, él estaba bebiendo la última parte de su copa
- como entraste a mi casa – mencione molesta, el señalo la puerta con la copa vacía que llevaba en su mano - quien te dio la llave
- es mi casa
- no es tu casa, yo la compre
- todo lo que es tuyo por derecho también es lo mío - sonrió
- está propiedad está a mi nombre, y me vas a decir de donde sacaste la llave
- quien crees que te la puede ofrecer a mitad de precio, yo pague la otra mitad. Así que eso también me hace dueño de la mitad de esta casa
Sentí una cólera interna que tenía ganas de golpearlo y decirle que me deje en paz, porque todo este tiempo que creí que yo me mantenía con mi propio esfuerzo, resulta que este estúpido era quien me había hecho un favor, entonces recordé el segundo año que viví separado de él, cuando ninguna editorial se ofrecía a aceptarme... entonces apareció cinco mil dólares en mi tarjeta, fui a consultarle al banco sobre este depósito pero nadie sabía quién lo había depositado y simplemente ignoraron mi solicitud.
- ¿Qué más hiciste? ¿que más me ofreciste sin avisarme?
- ¿Aparte de comprar esta casa? Tu tarjeta, la deposito mensualmente. Tienes a una ayudante de limpieza que por cierto te cobra algo mínimo pero realmente me sale muy cara
- Celi?
- Si la señorita Celi, también tienes un personal de seguridad que por cierto hoy no lo vi rondando la casa, supongo que tendré que despedirlo se supone que tiene que estar pendiente e informarme a quienes traes a casa. También...
- Me iré... - mencione molesta
"por dios habían todavía más cosas?" sin querer escucharlo más cruce por su lado e ingrese a casa, subí a mi habitación y saque mi maleta
- Que estas haciendo?
- Me iré
- A dónde?
- Donde sea – respondí
- Puedes volver a casa, si lo deseas
- Déjate de tus estúpidas bromas WooHyun – me gire para observarlo
- Preocuparme de mi mujer no me parece algo estúpido
- No soy tu mujer
- Pues allí estas mal – se acercó hacia mí - eres mi mujer por derecho, firmaste un papel en donde claramente nos unía, en donde se resume que tú me pertenecer como yo a ti
- Eso se terminó hace cinco años – él me mostro una sonrisa y se puso en frente mí, encuadro mi rostro entre sus manos
- No mi vida, eso dura hasta que la muerte nos separe – unió sus labios con los míos y comenzó a moverlos con exigencia, intente apartarlo colocando mis manos en su pecho, él alejo una mano de mi mejilla lo que me dio tiempo para separarme pero entonces me tomo de la cintura y me apego a su cuerpo con mayor fuerza - y mi mujer no invita a extraños a casa
- Suéltame- mencione
- Para que lo trajiste, crees que no me iba a dar cuenta? Crees que soy tan tonto para burlarte de mí en mis propias narices...
- No sé de qué hablas, suéltame Woohyun hueles a alcohol
- Oh! lo había olvidado, a mi mujer no le gusta sentir el olor a alcohol, dice que le parece algo asqueroso... pero mi vida solo tome vino – acerco su rostro nuevamente
- Suéltame...
- Él va a ser tu medio para que consigas tus caprichos?
- ¿Qué?
- ¿quieres un hijo? Pues lo vas a tener conmigo, no pienso criar el niño de otro.
***
miahne por demorar en actualizar, miahne.
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Bésame
Ficção AdolescenteTítulo: Bésame Reseña: A los diecisiete años Anne estaba segura que había encontrado el amor de su vida, un joven apuesto que le llevaba por dos años de edad, él era escritor de novelas y todo un romántico, su alma gemela, decía ella. Cuando...