Entre vivos y muertos

C2

Eran cerca de las 11:30am cuando salí de casa para encontrarme con José, David y Mónica.

Cuando llegue a casa de José estaba Mónica tocando la puerta y gritando para que le escucharan.

Hey Mónica- grite para que me escuchará

Volteo y me saludo secamente, pues yo le caía algo mal y eso era de siempre.

Vamos al patio de atrás a ver si hay nos escuchan- dije para que dejara de gritar.

Dimos la vuelta por el pequeño pasillo y vimos a la mamá de José.

Señora estará en casa José- dijo Mónica amablemente.

Esta solo gruñó y volteo con una cara de odio, odio ciego.
Cuando se dió la vuelta me di cuenta de que algo andaba mal, empezó a correr hacia nosotros y me dió algo de miedo.

¡Mónica corre!!- dije algo asustado.

Sin más ni menos obedeció y corrió por delante de mi cerré la puerta de la entrada del pasillo para encontrarme de frente con ella y ver que sus ojos eran completamente blancos y sus venas se marcaban por todo su cuerpo, empezó a gritar y salieron de entre las casas algunas personas más o no se une eran pero humanos ya no eran.
La cara de pánico de Mónica era total estába completamente palida.

Corre vamos a la casa de David está a dos cuadras de aqui- grite por el pánico.

Corrí como nunca y para cuando menos acordé ya estaba en la entrada de la casa de David golpeando la puerta con todas mis fuerzas Mónica se me unió y empezó a golpear la puerta al igual que yo, abrieron la puerta y cai a los pies de David quien se encontraba con José, entramos rápidamente y David cerro con llave.

¿Que les pasó?- dijo preocupado

La casa de José- dije sin aire.

Ho ustedes también fueron vamos con José está en el sillón- dijo muy serio

Hola José- dijo Mónica

Igual saludé y me senté a su lado, empezamos a explicar de lo que habíamos visto.

Si, se escucharon ruidos a las 1 de la madrugada, me asome para ver qué era y las luces se empezaron a prender de las casas y abrieron las puertas para desatar el infierno, todas esas cosas corrían como animales y se devoraban unos a otros mi madre salió para atrás y una de esas cosas la atrapó la puerta se cerró gracias al aire y ella quedó afuera a merced de esas cosas dejándome a mi solo dentro de casa cesaron los ruidos y gritos a las 3:30 de la madrugada- dijo con una expresión de sería tristeza en su cara.

Tengo que ir a avisarles a mis padres fueron a casa de mi abuela- dijo muy apresurada.

Y yo tengo que ir en cuanto antes a casa con mi tío pues salió temprano por los víveres- dije con preocupación.

Hay que ver como pasa el día y que se calmen esas cosas que trajeron a fuera de casa- y luego saldrán- dijo David enojado.

Mónica se paró y le propinó una bofetada.

Voy a salir, por mis padres te guste o no, no puedo dejarlos solos- dijo al borde de llorar.

David- dijo José

Y todo quedó en un silencio muy incómodo.

Hasta que David rompió el silencio.

Mis padres murieron al igual que tu lo vas a hacer- dijo llorando.

Me sorprendí al verlo llorar.

Hay que hacer caso y quedarnos hasta que se larguen esas cosas de la calle-  dije abriendo la cortina.

Hay suficiente comida para que coman en la cosina- dijo David y subió a su cuarto.

Mónica subió detrás de él...
Y yo me quedé hablando con José sobre el tema, llame a mi tío pero al parecer estaba la línea muerta.
Subí para pedir prestado el celular de Mónica o David.

Esta la línea muerta - decía Mónica con el celular de David y de ella en las manos.

Su cara se tornaba triste y en David era lo mismo.

Pasaron las horas rápido, José y yo mirábamos como hordas de esas cosas pasaban frente a la casa, disparos de escuchaban muy lejos para luego desvanecerse con el gruñido de esas cosas. La intriga estaba en el aire no sabíamos cuando iban a dejar de salir esas cosas de las casas y las calles cercanas.

Me quedé dormido cuando el sol se estaba poniendo y la luna comenzaba a salir de entre las montañas, el cielo se tornaba naranja mientras mis ojos caían en un sueño profundo.