Entre vivos y muertos

C4

José

En el fondo de una habitación oscura se distinguía una silueta de gran tamaño que repetía.

Al filo de la hoz, la muerte te sonríe con sus dientes color blanco como el mármol, y su gran capa oscura te refleja la vida que llevaste antes de tú.

Despierta!! Es una pesadilla- decía David con una voz relajada.

Desperté y ví a Leonardo dormido en el sofá y a Mónica en el otro.

Era solo un sueño- me repetía a mi mismo tratando de calmarme.

El agua caía sobre la ventana y la lámina haciendo un ruido ensordecedor y calmante a la vez.

Pase por un cuarto oscuro y volvieron las imágenes a mi cabeza de mi pesadilla.

Qué hora es?- pregunté a David.

Un rayo se dejo ver por la ventana seguido de un trueno muy fuerte.

Las 3:34 de la madrugada- dijo despacio.

Me fui a la cocina y David detrás de mí se sentó en la silla y yo delante de él. El silencio fue muy incómodo pero David lo rompió.

Gracias por lo de ayer, me salvaste la vida- dijo con un tono de tristeza.

(Escuché ruidos adentro también unos gritos, entre rápidamente a ver qué sucedía y vi a David arrinconado contra la pared rápidamente reaccioné y le di una patada al individuo para que se apartara, este retrocedió 3 pasos y cuando se iba a lanzar contra mi David le dió una patada metiéndole en un cuarto y asesinando de varios golpes con el bate en la cabeza, David temblaba bastante era muy notorio, cerró la puerta y se fue hacia afuera, Mónica lloraba desconsolada y Leonardo solo miraba con una expresión de Ascó, abrace a Mónica y la acompañe a la salida el camino fue muy incómodo puesto que Mónica lloraba y David solo caminaba con la mirada perdida.)

De nada- dije fríamente.

Ise mal no debí... Creo que no podré dormir en días hoy haré guardía- dijo decidido.

Yo te acompaño- dije para no dejarlo solo.

Pasaba el tiempo y cada trueno alborotaba a las cosas de afuera que solo gritaban a la oscuridad.

Estaba viendo por la ventana, a ver si podía distinguir algo entre la oscuridad, hubo un relámpago y ví en mis narices a una de esas cosas mirando hacia dentro, más bien viéndome a mi, me asusté y caí para atrás, este grito y golpeó el vidrio destrozándolo grite y Leonardo me tapo la boca, David bajo con una mochila corriendo y empezó a echar comida en ella y en una bolsa de plástico recogió de su ropa que estaba en la sala, cuando salí de un tipo de shock íbamos corriendo por la lluvia entre la oscuridad, los rayos nos dejaban ver por cortos periodos de tiempo había muchas de esas cosas en la calle David las apartaba con el bate algunas caían y ya no se levantaban.

La fuerte lluvia, el cabello mojado sobre mi rostro, la mano de Leonardo agarrándome de la muñeca gritos de desesperación de David, Mónica llorando a gritos, los relámpagos dejando ver un panorama aterrador, la sangre empapando el concreto y los truenos hacían todo más difícil de entender y terrorífico, la vida ya no era como la conocíamos solo sabía que ahora en adelante sería así y talvez más peligroso.

Al filo de la hoz, la muerte te sonríe con sus dientes color blanco como el mármol, y su gran capa oscura te refleja la vida que llevaste antes de tú. Un corte profundo en mi pecho la sangre mancha el piso y el reflejo de mi cara sobre este mismo.

No mereces vivir... El tiempo se acaba- dijo con una voz de ultratumba, mientras se quitaba la capucha.

Desperté alterado, estábamos en la casa de Leonardo, una casa grande, las puertas bloqueadas con muebles y David recargado en una durmiendo.

Oye despierta- dije mientras movía el hombro de David.

Despertó asustado, su respiración era acelerada.

Que? Que paso? - dijo alterado.

Que paso anoche?- pregunté preocupado, las imágenes de la noche volvían a mi cabeza, pero no lo veía claro.

Empezaron a entrar por las ventanas y yo... Logré guardar algunas cosas, la puerta principal fue derrumbada, salimos por la trasera y empezamos a correr 10 cuadras sin parar entre todas esas cosas, le dije a Leonardo que te tomara de la mano ya que al parecer no respondías, golpeaba a los lados con el bate y logré apartar a esas cosas de nuestro camino, la lluvia era ensordecedora y no nos escucharon ni vieron, logramos llegar a la casa de Leonardo y pues, aquí estamos.- dijo con muchas energías.

Escuché un bostezo y volte para atrás era el tío de Leonardo, seguía con vida...

Ya se retrasos, tarea el internet y falta de inspiración, fueron los factores por los que no escribí pero estoy listo para seguir con esto.