El aire corría, mientras la lluvia fría caía sobre mi pálida piel, el clima era perfecto me encandaban los días nublosos y me dirigía rápidamente entre los pinos, me sentía libre, mientras las gotas resbalaban sobre mi rostro pero ya no podía ser libre siempre seria esclava de los secretos de mi pasado; pero ahí en el final del camino se encontraba donde comenzaría mi nueva vida.
Una casa pintoresca casa de pueblo con patio delantero y un letrero viejo que decía: "se rentan cuartos".
Entre empapada, y al mismo tiempo de abrir la puerta una campanada sonó y salio una señora con un rostro amigable, mayor creo que tenia que tener unos 55 años, vestía un traje a juego azul cielo y un delantal, era pelirroja de las naturales de esas que tienen pequitas de un tono rojizo.
- Hoo dios mio pero si esta empapada pase rápido que aquí esta cálido. Se acerco y me dio unas toallas mientas me quitaba mi gabardina amarilla. me tomo del brazo y me llevo a una silla cerca del fuego.
- Que amable es, no se preocupe. Dije brindándole una sonrisa.
-Disculpe, que tonta soy. Me presento me llamo Mery Jakes y soy la dueña de esta casa de cuartos.
-Mucho gusto. (asentí) me llamo Camila Willch's y esperaba poder quedarme aquí.
-Claro,por su puesto. En seguida le daré una habitación, vera que sera cálida.
- Se lo agradecería mucho, estoy muy cansada y me gustaría descansar.
-Claro.
Me dio una llave con un llavero viejo de madera,
Wili-wili ¡¡
Grito insistente y después de unos minutos apareció un muchacho de piel un tanto bronceada y unos lindos ojos color miel, quien tomo mi gran maleta color vino y me indico que lo siguiera.
Subimos unas escaleras de caracol. y atravesamos unos pasillos muy pintoresco, que el los muros colgaban cuadros y retratos; hasta que en el 3cer, piso de la casa y el pasillo con solo 3 cuartos llegamos a la puerta del fondo donde seria mi habitación.
Despedí a wili, y entre a mi cuarto. Era amplio y con una cama doble , un espacioso closed y un gran ventanal que lo cubrían unas cortinas oscuras.
Me desnude y me metí a la tina , respire profundo y tenia que planear mi nueva vida.
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Algunos rayos de sol débiles se escurrían por las cortinas y me pegaron en la cara, al oír algunos ruidos, me di cuenta que las personas ya estaban despiertas. Me desperté, me di una ducha y me quede parada frente al espejo del baño observadome, respire profundo y me vestí para bajar al comedor.
Era una gran mesa y había 9 personas sentadas, unos estudiantes, otros aventureros y solo un pareja de ancianos que se veían muy lindos.
Salude y me presente ante todos, y ellos hicieron mismo, todo estaba bien hasta que comenzaron a preguntar, de donde venia, de mi familia, etc.
-¿Que es esa forma de incomodar a los nuevos?, deberían dejarla en paz ella contra lo que quiera cuando sea tiempo amigos.
Dijo entrando a mis espaldas un muchacho, apuesto de piel bronceada, lindos rizos negros y unos ojos cafés. Que pos suerte me salvo de responder esas preguntas
- Buenos días y la señorita huésped ¿como se llama?
- Hola, me llamo Camila. y le tendido la mano
- Yo Carlo, y es un verdadero placer conocerla. respondió a mi saludo.
Desayunamos y comencé a conocer a los que habitaban la casa en silencio, hasta que decidí hablar.
- pues como es obvio, soy nueva y necesito trabajo ¿alguien sabe donde puedo comenzar a buscar.?
-Mira que suerte tienes, (me dijo muy sonriente Carlo) se que se busca una linda secretaria en la empresa de lo Cree'n y si quieres podría llevarte.
-por su puesto.
Al acabar el desayuno espere en la puerta a Carlo y nos dirigimos en su camioneta al pueblo, no era muy grande pero tenia sus empresas y sus pobladores parecían amigables.
Me dejo en las puertas de un gran edificio gris. Pregunte con la resecepciopnista y me indico que tenia que, entrevistarme con el señor Cree'n y suvi en el elevador hasta su oficina.
Entre a una gran y lujosa oficina pero un tanto oscura, tarde un poco en acostumbrar mis ojos y vi que tras el escritorio recargado en una silla de cuero. Presenté mi currículum y el señor muy atento me dio el empleo inmediato al parecer le urgía una secretaria. Salí de las oficinas y me disponía a cruzar la calle, tome mi ipod y me puse los audífonos me distraje un poco cuan casi inmediato un gran y lujoso auto deportivo negro que se aproximo hacia mi y con un ligero impacto me tiro al suelo. EL auto se detuvo y el conductor salio.
Senti que me ayudaban a levantarme y vi a un apuesto muchacho, alto, pelo negro, piel blanca, no se le veian los ojos tenia gafas oscuras y que se vestia un trahe negro que le hacia ver perfecto.
-Que no se fija, estuvo apunto de matarme. le dije un tanto alterada.
-A que se refiere, la que no se fija es usted, que ¿acaso esta loca?
-No le vasta averíame daño, además me insulta.
- La verdad tenia intención de disculparme, pero no lo are por que usted tubo la culpa.Quien viera lo que tiene de bonita lo tiene de altanera. Me dijo con una seductora sonoriza.
Fue cuando tuve un mareo y casi me derrumbo, pero el me tomo con sus brazos. Pero inmediatamente que lo hizo me zafe y me fui haciendo coraje.
Llegue a la cena y luego me fui a mi habitación, me derrumbé en mi cama y me quede dormida pensando el la lienda sonrriza del patan de la tarde.
