Capitulo 10.

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Narra ________.

Esa misma noche salimos usando la capa de nuestro padre, iríamos a casa de Hagrid para preguntar sobre la cámara de los secretos, tuvimos suerte de que nadie pudiera descubrirnos al momento de salir del castillo. Salimos cuidadosamente hasta estar frente a la casa de nuestro amigo Hagrid, nos acercamos hasta tocar la puerta. Cuando abrió tenía una ballesta a la mano y cargada.

― ¿Hola? ― nos descubrimos al instante ― Ah, son ustedes... ―

― ¿Para qué es eso? ― pregunté temerosa

― Ah esto, esperaba que...ah, no importa ¡pasen! Les serviré té ―

Pasamos y Hagrid se veía nervioso, yendo a su cocina tomó varios vasos y la tetera para servirnos té pero de verdad algo no estaba bien pues llenó uno de los vasos hasta que el té comenzó a escurrir por los costados.

― Hagrid, ¿estás bien? ― pregunta Harry

― Sí...gracias ― respondió no tan convencido

― ¿Supiste lo de Hermione? ― preguntó Ron

― Oh sí, ya lo supe ― asintió viéndonos

― Oye, hay algo que queremos saber ¿Sabes quién abrió la cámara de los secretos? ― pregunté

― Lo que deben entender sobre eso es que...― antes de responder Fang comenzó a gruñir ― Rápido, escóndanse ―

Nos dirigimos a un rincón de la casa y nos cubrimos los tres viendo lo que ocurría.

― Buenas noches, Hagrid ― escuchamos, era Dumbledore ― Yo quería... ¿Podemos? ―

― ¡Claro! pasen, pasen ― pasó Dumbledore y un hombre más

― El jefe de papá ― susurró Ron ― Cornelius Fudge, el Ministro de Magia ―

― Malas noticias, Hagrid, malas noticias. Ha habido tres ataques a familiares de muggles. El Ministerio tiene que hacer algo ― dijo Cornelius

― Pero yo jamás... usted lo sabe profesor ―

― Que quede claro, Cornelius, que Hagrid...tiene todo mi apoyo ―

― Albus, escucha, tengo órdenes de llevármelo por sus antecedentes ―

― ¿Llevarme? ¿Llevarme adónde? ¿A la prisión de Askaban? ―

Los chicos y yo nos miramos sorprendidos.

― Me temo que no tenemos elección ―

De nuevo, la puerta sonó y un hombre se dejó ver, al instante pude reconocerlo por esa cabellera rubia.

― Ah, ya estás aquí, Fudge. Excelente ― era Lucius Malfoy

― ¿Qué hace usted aquí? ¡Largo de mi casa! ― dijo Hagrid molesto

― Créeme, no me produce ningún placer venir aquí a tu... ― se acercó hacia donde estábamos y retrocedimos ― ¿Le dijiste casa? No, llame al colegio y me dijeron que el director estaba aquí ―

― Y díganos ¿Qué quiere usted, conmigo? ― pregunta Dumbledore

― Los miembros del consejo hemos decidido que es tiempo de que abandone el colegio. Es una orden de suspensión ― le entregó un pergamino enroscado ― Verá las doce firmas también. Digamos que ya perdió su... toque. Y con tantos ataques, no quedarán más familiares de muggles, en Hogwarts. Sería una pérdida terrible para esta escuela ―

― No pueden hacer eso ¡Los hijos de los muggles no podrán salvarse! Habrá ataques más fuertes, se los aseguro ―

― ¿Eso crees? ―

¿Una Potter y Un Malfoy? | Draco Malfoy |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora