sábado

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Llegó el fin de semana, aquel día habían quedado las dos parejas.

Nadia se despertó a las diez, se dirigió al salón allí estaba su abuela, le dió dos besos de buenos días y comenzaron a hablar.

Arancha se despertó a las once, aquel día estaba un poco nerviosa, aquel día lo pasaría con el chico que más quiere, recibió un mensaje "buenos días princesa", era de Iván, "buenos días mi chico" contestó.

Cuando Will se despertó cogió el movil y llamó a Nadia.

-Hola rey dijo Nadia.

-Hola princesa, ¿Cómo has dormido? preguntó Will.

-Bien ¿y tu? preguntó Nadia.

-Bien, porque he soñado contigo dijo Will.

-¿Si? ¿y que pasaba? preguntó Nadia.

-Que nos casabamos y nuestro amor era para siempre dijo Will.

-Los sueños se hacen realidad dijo Nadia.

-Te quiero mucho princesa dijo Will.

-Y yo a ti dijo Nadia.

-Esta tarde a las cinco estoy en tu casa ¿Te parece bien? preguntó Will.

-Si, perfecto dijo Nadia.

-Vale princesa, luego nos vemos, te quiero dijo Will.

-Y yo a ti rey contestó Nadia.

Ambos colaron el teléfono, Will se dirigió a la ducha y Nadia se puso a desayunar mientras veía la televisión en el salón.

Arancha recibió una llamada de Iván.

-Hola cielo dijo Arancha.

-Hola amor dijo Iván ¿Cómo estas? preguntó.

-Muy bien ¿Y tu? dijo contestando.

-Muy bien cielo, hoy nos vemos dijo Iván.

-Sí contestó Arancha.

-A las cinco me paso por tu casa dijo Iván.

-Vale contestó Arancha ¿A dónde iremos? preguntó.

-A dar una vuelta y cenaremos supongo dijo Iván.

-Me parece un buen plan dijo Arancha.

-A mi con estar a tu lado, me parece bien cualquier cosa contestó Iván.

-Te quiero mucho contestó Arancha.

-Y yo a ti mi vida contestó Iván.

-Me tengo que marchar cielo, luego nos vemos dijo Arancha como despedida.

-Valr cielo, te quiero mucho dijo Iván.

-Y yo a ti rey contestó Arancha.

Ambos colgaron el teléfono a la vez.

Eran las cinco, Will se pasó a por Nadia e Iván a por Arancha, habían quedado los cuatro a las cincon y cuarto en la puerta del cine donde iban a pasar allí la tarde.

Will y Nadia llegaron, pero Iván y Arancha aún no, decidieron esperar sentados en la moto hablando para entretenerse y hacerse mas amena la espera. Pasaron cinco minutos, Iván y Arancha llegaron, Will y Nadia se bajaron de la moto y se saludaron entre los cuatro.

Miraron que película poder ver esa tarde, se decantaron por una película de miedo en tres dimensiones.

-Si tienes miedo me abrazas dijo Will a Nadia mientras se sentaban en su asiento.

-Y si tienes miedo me abrazas tu a mi contestaba Nadia.

La película comenzaba y Nadia notaba como un brazo pasaba por sus hombros.

-¿Que pasa? ¿Ya tienes miedo? preguntó Nadia.

-No, es solo una excusa para poderte abrazar dijo Will mientras sonreia.

Nadia echó su cabeza sobre el hombro se Will y el la abrazaba por el brazo.

Iván y Arancha veían la película mientras se daban de vez en cuando un beso.

La película acabó, ambas parejas se levantaron de sus asientos y se dirigieron a la salida, allí decidieron ir a tomar algo a algún bar cercano.

La noche acabó Will y Nadia se marcharon al igual que Iván y Arancha, antes de irse se despidieron.

-Esta tarde ha sido muy bonita a tu lado dijo Will mientras aparcaba la moto en doble fila en frente del portal de Nadia.

-La verdad es que si, me lo he pasado genial dijo Nadia.

Will se lanzó a Nadia y comenzaron a besarse muy apasionadamente.

-Mañana no te podré ver dijo Will.

-¿Y eso porque? preguntó Nadia.

-Nos han invitado a mi y a Iván a participar en una carrera de coches contestó Will.

-Ya me dirás en que posición quedaras, supongo que de los primeros dijo Nadia.

Se volvieron a besar como despedida, Nadia sacó sus llaves del bolso y abrió la puerta del portal. Will se dirigió hasta su moto donde la arrancó para marcharse a su casa para descansar para mañana.

Iván y Arancha habían llegado a casa de Arancha.

-¿Mañana nos veremos? preguntó Arancha.

-No puedo mi vida, mañana tengo una carrera de coches con Will, nos han invitado unos colegas contestó Iván.

-Pasatelo muy bien cielo contestó Arancha.

-¿No te mosqueas verdad? preguntó Iván preocupado.

-No, por un día que no puedas quedar no pasa nada cielo, disfrutalo contestó Arancha, me tengo que ir continuó mientras se acercaba a darle un beso de despedida. Se acercó hasta su portal y abró la puerta mientras Iván arrancaba la moto para marcharse.

un amor inesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora