wasted youth ;; bea miller

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A la de tres... La señal.

En la pista había cinco patrullas concentradas, con cuatro policías por cada una. En total veinte enemigos que debían ser eliminados.

No necesitaban matemáticas para saber quién se encargaba de que, era lógica e instinto.

-Repaso.- dijo Justin. -Camila, Sabrina y Kait van por las dos primeras en lateral. Michael, Madison y Bea por las dos en vertical y el festín lo dejáis para Luke y Ari.-

-¿Dónde está Lauren?- preguntó Camila.

-Terminando el trato.- fue la respuesta corta de Ariana.

Black Widow era la chica ocupada de los tratos de exportación e importación. No quiere decir que no supiera accionar, pero Lauren era profesional en provocarte escalofríos con una sola mirada seria.

La función de Justin en esa misión no era sólo manejarlos y decirles que debían hacer. Justin tenía que estar alerta ante cualquier fallo y pensar rápido en como solucionarlo. En pocas palabras; Justin era "El ángel guardián".

Una vez más 1:00 am marcaron, Camila, Sabrina y Kait se dirigieron a las patrullas. Había bandanas negras que cubrían el ochenta por ciento de su rostro. Rose era la única que portaba un arma en ese equipo,capacitada por Justin para disparar si sus compañeros o ella misma estaban en peligro. Esa arma fue llamaba Rose Marie y podía ser usada únicamente por Camila.

Kait tocó la ventanilla de la primer patrulla, llamando la atención de la segunda también.

-¿Qué quieres, corazón? - fue lo que dijo el policía. -Estamos ocupados.-

-¿Demasiado? ¿Incluso para mi?- Kait sacó de su escote una pequeña bolsa que sólo contenía harina, pero el momento hizo que los oficiales no lograran distinguir la diferencia.

-¿De dónde sacaste esto? ¿Quién te lo dió?-

-Esto es sólo un comunicado, señores oficiales. Salid de la ciudad si no queréis que Alpha os mande saludos directos. - Kait tiró la bolsa a la cara del oficial quién no dudó en cerrar el vidrio totalmente asustado.

Sabrina y Camila los miraban atentas desde el frente, con sus brazos cruzados, esperando cualquier movimiento.

La Policía no es tan valiente como la hacéis ver, por lo general, basta saber sus "pequeños trabajos" y amenazarlos con ellos para que se caguen encima.

Michael tenía otras maneras de inculcar miedo y ganar respeto. Claro que esto excluía a Luke y sus compañeros.

-Ustedes no os cansáis, ¿Verdad?- preguntó Michael. -Parece que tendré que mandarle vuestros pedazos a vuestras familias, en sobres, a la antigua. - golpeó el capó de una patrulla logrando un sobresalto en los ocho oficiales.

Madison y Bea estaban a los costados de las dos patrullas, cada una apoyada en las ventanillas, respirando en la cara de los oficiales.

-Si no queréis ver a vuestros hijos o esposas en la lista de desaparecidos de este mes; será mejor que os alejeis de una vez. ¿Vale? Me alegra que puedan comprender.- concluyó Michael.

Y por eso es uno de los Crazy Twins.

Luke y Ari eran un equipo increíble, tenían a su favor que dos hombres "Poderosos" los amaban, nadie se atrevería a tocarlos. Pero tenían algo más a su favor; y era que mientras Ariana los seducía, Luke los asesinaba.

-¡Hey, chicos!- Ariana se sentó en el capó de la camioneta. -Os veis cansados, guapos.- sonrió.

The Mama y uno de los Crazy Twins no era algo que llegaras a ver todos los días, en una calle poco iluminada y casi sin coches pasando, en verdad, no había coches pasando.

-¿Qué quieres, Grande? Estamos ocupados. - gritó uno de los oficiales.

-Daros un mensaje, no os altereis que os hace daño al cutis. - les guiñó un ojo.

Los oficiales se hartaron de la vacilada de Ariana por lo que arrancaron la camioneta, diapuestos a tirarla, más el intento resultó fallido antes de completarse pues Luke dió cuatro balazos desde la parte trasera de la camioneta; directo a sus neumáticos.

-¡Mierda!-

Ariana largó una carcajada y se bajó. Fue hasta la ventanilla del piloto y con voz ronca dijo: -Llama un taxi, cariño. Seguro os lleva.-