Agujero negro

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  Su rostro era un muro que tenía dibujado una sonrisa, detrás de el se escondía facetas que escasas veces se colocan a través del muro y difuminaban la sonrisa, pero ella las traía de vuelta a ese agujero oscuro y repintaba la sonrisa. ¿Que había en ese agujero? Sería una pregunta errónea de cierta manera ¿Por que estaba ese agujero? Tenía una escasa y vagabunda certeza de que quizás esa era la pregunta correcta. Quizás ese agujero se formó por cada puñalada que recibía en el mismo lugar. Cada puñalada la hacía sangrar, de manera cómo si fuera agua la que salía de sus ojos y empañaban sus pestañas, ¿Que quiero decir con esto? La sangre de las heridas se colaban y se convertía en lágrimas, cada que su corazón sangraba su ojos lloraban, unas veces era lo suficientemente fuerte para detener el sangrado, otras no... La interés no debe ser impuesto en una persona por la curiosidad que sienta de saber que se encuentra en el agujero. Esta en sí esta dispuesto a cerrarlo. Luego cuando deje que sangrar, quizás puedas saber que se encontraba dentro  

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