Have you ever seen the lights? (Ryden)

Escena 1

-Ry, ¿me pasas el ácido clorhídrico?

...

-Ry, el ácido.

...

-¡Maldición Ross! Pásame el ácido antes de que te haga beberlo.

El castaño reaccionó rápidamente ante la amenaza de su amigo y suspiró para después entregarle el matraz que contenía tal sustancia.

-Spencer, no hables tan alto, haces que me duela la cabeza.

El chico rodó sus ojos azules y continuó con su tarea en el laboratorio.

-No es mi maldita culpa que te desveles todos los días. Ni siquiera me dices que haces. Sólo llegas aquí con ojeras, mal humor y cara de muerto, soy tu amigo y exijo una explicación.

Ryan se encogió de hombros. No pensaba contarle a su amigo.

-Son sólo problemas familiares, todos los tenemos, ¿no?

Spencer sólo suspiró antes de mirarlo con tristeza.

-Sabes que si hay algún problema, puedes contármelo, ¿verdad? Soy tu amigo y siempre estaré aquí para ayudarte.

-Lo sé.- sus labios se curvaron para formar una sonrisa a medias.- Ahora, apúrate, ya me quiero ir.

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-Es injusto, siempre eliges a Siniestro.

-Es injusto porque tu eliges a Green Arrow sabiendo muy bien que puede lanzar flechas desde larga distancia.

Ahora, ambos amigos se encontraban en la habitación  de Spencer. Ambos jugando videojuegos.

Ryan pensaba que era estúpido. Tenían examen de química al día siguiente por lo cual habían decidido ir a casa del menor para estudiar, pero esa idea se había ido al carajo cuando ambos adolescentes observaron el juego de Injustice sobre la cama del dueño de la casa.

-¡Sí! ¡Gané!- cantó de forma victoriosa el poseedor de ojos azules para después mirar con autosuficiencia a su amigo.

Ross sólo se dedicó a rodar los ojos.

-Iré a buscar un vaso de agua.- Mencionó levantándose de la cama para después salir de la habitación. Escuchó claramente a su amigo gritar para que le trajera una bebida a él también.

Caminó hasta la cocina y procedió a abrir la nevera encontrando varias latas con diferentes bebidas.

Tomó una botella de agua para él y una soda para Spencer.

Regresó a la habitación encontrando a su amigo que revisaba su celular con una sonrisa boba en los labios.

-¿Jon te mandó un mensaje?- se aventuró a preguntar.

Las mejillas del contrario se sonrojaron suavemente. A Ryan le causaba gracias porque le recordaba a un niño pequeño a pesar de que ya contaba con 17 años.

-No, no, no, no... bueno sí, pero no es nada, sólo me invito al cine.

-Cool, ¿aceptaste?- cuestionó en el momento en que se sentaba sobre la cama.

-Sí, hoy a las 8.

El joven de cabello ondulado revisó el reloj de la habitación. 6:20 pm.

-Tienes tiempo, yo en cambio creo que debo ir a casa.

-¿Qué? Oh vamos, una partida más.

Ross lo pensó un momento.

-Una más.

Ambos sonrieron.

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Las gotas caían lentamente desde el cielo.

Llevaba los audífonos puestos mientras caminaba a casa. Su padre le había dicho mil veces que no lo hiciera, pero él no estaba ahí para verlo.

La vista estaba pegada a sus zapatos y a las gotitas que graciosamente chocaban contra el asfalto y creaban pequeñas ondulaciones al caer.

Tenía frío. Su chaleco no ayudaba en nada. Lo usaba más bien como un accesorio, no para cubrirlo y evitar que muriera congelado.

Subió la mirada porque se encontraba cerca de su casa.

Lo primero que observó fueron luces.

Muchas luces.

Azules, rojas y blancas.

Oh no.

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La líneas son separaciones, lo sé :'u las mejores separaciones que verán en su vida.

Sí, soy yo la que tiene un problema con Injustice pero es tan genial :(

¿Se dieron cuenta que el resumen de esta obra se escucha como un episodio de alguna serie?

Bueno ya, espero que lo hayan disfrutado <3

¡Hasta la otra!