01/12/18

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Hoy dos pibes se pelearon por Milena, una piba "hermosa" del curso. Nunca me generó nada, ni celos ni admiración ni felicidad ni molestia, tan gila que ni me va ni me viene. El tema es que cuando en tutoría no tenemos de qué hablar, como es a la última hora, nos vamos temprano, pero como esta vez nos quedamos hablando de la estúpida pelea esa fue alto desastre todos gritándose, horrible.
Hoy renunció mi profesor de historia. No lo voy a extrañar, él se enojaba todo el tiempo conmigo porque llego tarde a todos lados, y puede que haga todo con demasiada calma pero no voy a estar corriendo para llegar a una clase en la que no estudiamos nada; y encima es de esos profesores morbosos que hablan mirando las tetas de las estudiantes, o qie si sos sensual te pone buenas notas. ese profesor y los que son así me dan asco. Solo tiene venir y dar clase; no somos taan ruidosos o molestos y hay gente que le interesan las materias, ese desinterés va causar una obvia desconexión con el estudio o mismo su materia en particular, un idiota, un hipócrita ese tipo.
También Me enteré que en las viandas hoy llegó un sandwich podrido. Lo mejor fue cómo se enteraron: dos chicos fueron corriendo al baño uno a vomitar y otro bueno... lo devolvió de otra manera; fue muy chistoso cómo pasaron de la desesperación por comer a la desesperación por escupir lo que habían ingerido sin antes fijarse el estado de la comida.
Como ya había comentado, en mi vida no pasa nada muy interesante así que esto fue todo lo que pasó en el colegio para contar en el diario.

Después me quedé con chicos del turno tarde que estaban por entrar a la jaula de la que yo acababa de salir. Éramos 5 en total: Lula (que en realidad es del turno mañana peor de un año mayor que yo, ella es de 5to), Lola y otro dos que solo los tenía de vista. Nos quedamos hablando y fumando un poco y de repente se me había pasado la hora. Habíamos dicho de ir a dar unas vueltas por ahí antes de que entren pero nos colgamos varias horas. De un momento a otro nos quedamos hablando Lula y yo solos, los demás se habían ido dispersando. Lula es muy inteligente, piensa y le interesan las cosas; no busca llamar la atención. Tiene una hermosa melena rubia oscura y además que hoy se había hecho unos rulos que le quedaban como si fuese León, tenía puesto un top estilo animal print y unas calzas negras hasta la rodilla que quedaba con un re estilo, y siempre es así , siempre tiene mucho estilo encima. Se tenía que quedar hasta la hora de la salida del colegio por su hermano menor, así que esperé con ella un rato, faltaba demasiado. Después vino Val, otra medio amiga de la tarde y nos quedamos un poco más pero me dio hambre y como no tenía plata me volví a casa.

Mi camino a casa fue casi el mismo de siempre: agarré la bicicleta que había encadenado al poste de luz más cercano cuando llegué al colegio, caminé media cuadra hasta el kiosko de la señora Grand (que ahora me pongo a pensar que siempre estuvo ahí, desde que me mudé, hace ya unos 7 años, y sigue igual: con su cuerpito de pasa de uva y pelo tipo arena caribeña, pero se la banca con todas y se encarga sola del local. La considero una sobreviviente de la sociedad, ella es feliz haciendo lo que hace). Le compré mi rutinario helado de agua -hoy fue uno de mango- anduve un par de cuadras en la bici para alejarme aún más de la avenida y entrando por un pasaje me encontré con la placita; apoyé la bici en un árbol y me senté. Llegó el momento de mirar y pensar, o siquiera solo con mi helado y la bici (y los nenes del vecindario jugando a la mancha o haciendo alguna construcción con la arena). Ya empezando a anochecer y las luces de la ruidosa ciudad prendiéndose, la plaza se fue quedando vacía, como los árboles y las ojas en otoño, y seguí con mi viaje a casa. Yendo por callecitas poco transitadas pude ir lento observando cada detalle de las casas que adornan mi corto viaje como su contase todas las estrellas en un cielo nocturno.

Llegué hace unas horas a casa. Pensé que ya estaba mamá porque vi unas luces prendidas pero me equivoqué, no hay nadie. Solo me estaba esperando una de las diarias cartitas de mamá (prefería dejarme anotado en un papelito que hablarme directamente al wsp):

"Me comí fideos que sobraron de ayer, estaban riquísimos, te esperé pero como no llegabas a casa supuse que estabas con amigos. Dejé las luces prendidas por si llegabas de noche; hay cositas en la heladera para preparar y un postre sorpresa...
PD:No te quedes despierto hasta muy tarde, mamá <3"

Preparé una merienda-cena que consistía en unos panes tostados con queso y tomate, un café recalentado de hoy a la mañana y una polenta con tuco y verduras hervidas. Encontré un pedazo de cheese cake en el freezer pero decidí dejárselo a mi mamá para cuando llegue. Me llevé todo a mi pieza para comer viendo una serie o documental en Netflix, o escuchando música.

Llegó mi mamá. Es bastante tarde. últimamente llega tarde del trabajo y eso me preocupa, no quiero que se exija mas de lo necesario. Dudó en abrirme o no la puerta, pero se decidió en un sencillo toque a mi puerta y un cansado "adiós".

El Vuelo Del PezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora