0.2

74 16 1
                                    

Otro día. Misma rutina, esa ya es mi vida y tendré que esperar a cumplir la mayoría de edad para así poder viajar.

Desdé que estaba pequeño y ver cómo mi padre venia de sus exploraciones y cómo él me contaba cómo cada estrella o galaxia había visto, era realmente hermoso ver cómo sus ojos mostraban cierta emoción al hablarme de ello, yo con gustó lo escuchaba cómo todas las noches en las que él llegaba hasta el último de sus días ya hasta recibir la noticia. Ya no escuchaba ninguna historia y no me iba a encerrar en el cuarto a deprimirme, más de lo que yo ya estaba con aquella noticia que me habían dado hace ya algunos años atrás, aprendí a superarlo, he de aceptar que no fue para nada fácil hacer eso. Pero pude hacerlo y estoy orgulloso de ello.

~ --- ~

— ¿Por qué no vas y te haces amigo de aquella chica? — estaba con mi madre en la sala de estar, ella había llegado temprano, eso me alegro hasta el punto de no salir por las noches y esperar a que ella saliera por su balcón. Ahorita mi mamá me cuestiona diciendo que debería de hablar con aquélla chica pelirroja la cuál es mi vecina, dice qué tiene mi edad casi, solo por unos pocos años que me gano yo.

— ¿He oído que está sola y que sus padres se pelean mucho, porque no vas a verla? — Volvió a sugerir.

Pero en este instante quería estar con ella. Con mi madre, ya no quería que ella se fuera.

— Lo pensaré — Fue lo último que salió de mi para así seguir con otra plática.

Ella me estaba contado una de sus grandes historias en la luna, de cómo es que esta era. Se le veía tan feliz que yo por un instante vi que el brillo en los ojos de ella había vuelto.

~~~ •

Me pregunto, ¿Cómo es que ella se ha de llamar?

Tú Eres El Deseo De Mi Estrella FugazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora