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Cuando llegamos, Taehyung tardó en salir, estaba peleando con la máquina de impresión, de nuevo.

- ¡Espera sólo un momento, Yoongi! - Gritaba desde atrás, mientras que yo no dejaba de reír. Pobre de él, esa máquina siempre le sacaba canas verdes. Hoseok permaneció tranquilo, observando las cosas en el local, hasta que Taehyung apareció por fin detrás del mostrador.

- ¡Listo! - Me sonrió con esa sonrisa que se expandía tierna sobre su rostro. Cuando Taehyung desvió la vista de mí, la posó en la única persona que estaba conmigo. Hoseok lo miraba embobado.

- Oh. - Musité. - Taehyung, te presento a un amigo. Hoseok, él es Taehyung. - Dije al interpelado. - De el que tanto te he hablado; Taehyung, el es Hoseok, mi vecino.

La cara de Hoseok era de sorpresa, asombro y fascinación y en sus ojos existía un brillo que hace unos minutos no se encontraba allí.

- Hola. - Balbuceó.

- Hola. - Respondió Hoseok.

Ambos se sonrieron y luego Tae me dedicó su atención a mí.

- ¿Fotos nuevas? - Me preguntó, entusiasmado.

- Ya lo sabes. - Reí e hicimos lo de siempre.

Luego de unas horas y de que Hoseok y Taehyung se conocieran más. Decidimos él y yo que era hora de regresar. El sol ya se había puesto cuando Hoseok y yo caminábamos hacía el edificio.

- Tú amigo es muy bonito. - Musitó, ruborizado ligeramente. - Muy simpático, además. - Me solté a reír.

- Creo que lo pude haber adivinado. - Admití y él enrojeció más.

- ¿Por qué dices eso? - Preguntó, avergonzado.

- Por tu cara y cómo lo mirabas.

- ¿Tan obvio era? - Hizo un mohín.

- Algo. - Ambos reímos. - ¡Hoseok! - Dije, de pronto, quizá hasta sacándole un susto por la forma en que me miró. - ¡Tú sabes italiano!

- Emm... sí. - Musitó sin comprender; es que había cambiado de tema repentinamente.

- Dime qué significa... - Hice memoria para acomodar las palabras en orden y tratar de pronunciarlas correctamente. - "Che bella coppia che fate"

A lo mejor Jimin creía que ya se me había olvidado lo que el muchacho de la heladería nos dijo y que no me quiso traducir, pero para mala suerte de él, yo tenía buena memoria.

- Qué bella pareja hacen. - Dijo Hoseok.

- ¿Disculpa? - Hoseok rió.

- Eso significa. - Abrí los ojos ante lo evidente y ante la ilógica de que me emparejaran a mí con Jimin. Luego me solté a reír de nuevo; no sabía si avergonzado o de verás divertido. -

- ¿Por qué? - Inquirió, Hobi.

- Porque... lo vi en la televisión, en una película. Quería saber qué significaba. - Inventé.

- Claro. - Musitó.

- Me tengo que ir. Buenas noches, Hobi. - Dije, fingiendo un bostezo.

Lo cierto era que después de mí tarde con Taehyung y Hoseok, no estaba cansado; pero sí quería escapar de las escenas que Seulgi y Jimin protagonizaban en la sala. El chasquido de sus labios al juntarse, los suspiros, las caricias que se daban, todo me resultaba ahora insoportable.

- ¿Tan pronto te irás? - Me preguntó.

- Sí, estoy muy cansado. - Me pregunté si fingir otro bostezo sería muy exagerado.

MANUAL DE LO PROHIBIDO [JIMSU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora