Capítulo 1

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El señor Jung caminaba con tranquila por toda la casa, mientras se repetía mentalmente que ese, era un día cualquiera, pero por desgracia no lo era. Con el entrecejo fruncido, tomó una de las tazas colocadas en la repisa de en medio de la alacena, sirvió algo de café y se dejó inundar por ese tan característico olor que tanto le fascinaba.

Cerca de una hora más tarde, el ruido de varios pares de llantas deteniéndose en la entrada de su casa, lo hicieron percibir su pulso subir solo unos cuantos dígitos. Al fin habían llegado. Y tras el sonido de puertas ser abiertas, algunas voces se mezclaron en el aire, siendo cada vez más nítidas a cada paso que daban hasta la puerta principal.

Después de que se le explicara una vez más el motivo de su visita, el señor Jung observó el ir y venir de algunos extraños, colocando y armando todo el lugar para su comodidad.

* * *

— Entramos al aire en 5, 4, 3, 2 — dijo en voz baja el floor manager, haciendo una señal con su mano derecha.

— Muy buenas noches queridos televidentes, y muy buenas noches también al señor Jung, quien muy amablemente nos abrió las puertas de su casa, y ha accedido a una entrevista — dijo el MC dando el saludo de bienvenida al noticiero estelar.

Aunque, a pesar de haber accedido, la brillante luz que iluminaba su rostro lo hacía sentir tan incómodo, que comenzaba a arrepentirse, después de todo nunca se había acostumbrado a ser el centro de atención, ya que él era más un espectador, siempre lo había sido y ahora que su estrella no estaba junto a él, se sentía un tanto desubicado.

— Señor Jung — mencionó el MC, regresándolo a la realidad — sabemos de sobra, que en aquella terrible época, la cual nos tocó vivir, a casi 67 años de la guerra entre la República Democrática Popular de Corea — Corea del Norte — y nuestro país, la República de Corea — Corea del Sur —. Todavía quedan hasta el día de hoy, muchas historias que contar, historias que nos ayudarían a conocer ese lado humano que casi nunca se llegan a conocer en este tipo de casos... Así que nos gustaría, que usted nos contara, cómo fueron sus experiencias durante la guerra y qué significó para usted el ataque.

Taek Woon escuchó atento al entrevistador y después de darle una mirada rápida a las fotografías colocadas en su chimenea hablo.

— Primero que nada, buenas noches... y en segundo lugar gracias, gracias a ustedes que me dan la oportunidad de contarles un pedacito de mi vida, aunque tal vez sea la más cruda y dolorosa parte de ella...

Para mí, quien para ese entonces era un chico que apenas comenzaba a vivir, lleno de vitalidad y juventud, fue algo que cambió mi vida completamente. ¿Qué significó? — Taek Woon hizo una expresión de reflexión por un momento y después agregó — En realidad, la guerra para mi es sinónimo de prejuicio, siempre lo ha sido... es solo una lucha por el poder, insulso y sanguinario, por cierto. Considero que la situación de ambos países para ese entonces, solo trajo dolor y muerte de inocentes, tres años en batallas donde nada en absoluto se ha ganado, solo millones de muertes, familias perdidas, y una infinidad de niños huérfanos.

Dolor, miedo, valentía y amor, esos son algunos de los sentimientos que pude apreciar en carne vida... Todavía puedo recordar el olor a pólvora y sudor de los soldados. ¿Sabe? No es como cuando uno está en algún torneo de deportes, en el que después de hacer el pase decisivo, uno se siente feliz y grita "¡Ganamos!", saltando de alegría junto al resto de compañeros de equipo, no, en definitiva no lo es... En un lugar como ese, todos, sin excepción alguna, nos sentíamos devastados y tristes cuando una batalla era ganada.

— Pero cuéntenos ¿Cómo fue que usted llegó hasta el campo de batalla? y ¿Cómo fue la reacción de su familia?

— Solo puedo decir que no fue mi voluntad. De nadie en realidad... Déjame hacerte una pequeña reseña...

War And Love [KEO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora