Semidiosa por error

Primer Dia

Me encontraba en la sala de mi casa en Follet, todo estaba como en la ultima mañana en que habia estado en ese lugar, fui a la cocina buscando a mi mama pero no la encontre baje apresurada hacia el despacho de Albert y habia alguien sentado en su lugar suspire -Albert tuve el mas loco de los sueños...- me detube no era mi padrastro, era mi papa -No, no por favor no-

-No fue un sueño, estas dormida ahora, queria hablar contigo y supuse que este lugar te gustaria- me acerque a el lentamente

-De acuerdo-

-Ya no estas enojada conmigo por lo que veo-

-No o no lo se, mi mama me enseño a no juzgar a las personas, pero tu eres un dios, ¿no?-

-Si, yo jamas quise que las cosas terminaran asi Nat-

-Pero paso- el simplemente se mantuvo callado, no sabia que mas decirle asi que solo me mantuve callada, el se levanto y me mostro una pequeña caja -Es un regalo para ti, lo hice para tu cumpleños, para eso fui a visitarte pero te enojaste y no tuve tiempo-

-Gracias- lo abri dentro de ella habia un pequeño collar en forma de corazon con hermosos detalles y con unas letras grabadas en griego supongo por que nunca habia visto algo asi, no se como pero logre leerlo

Ναταλία

-Natalia- dije con mi voz entre cortada una lagrima broto de mis ojos y le sonrei -¿por que nunca me lo diste?- el estaba jugando con algo que parecia un pegaso de metal en sus manos

-No lo se, tu tienes el humor y el orgullo de mi madre-

-No la conozco- despues de que dije esto el levanto la cara y se puso totalmente serio -Y espero nunca lo hagas hija, si es posible no te aceques a nada que le pertenesca, me escuchaste- yo jamas lo habia visto tan enojado ni siquiera cuando le grite o cuando lo corri de mi vida, debo admitirles que me dio miedo asi que asenti.

-Muy bien, debes despertar ahora-

-Gracias por el regalo- le sonrei y el me respondio, no se si fue el lugar en donde estabamos o el hecho de que yo lo habia hecho sonreir pero me dieron ganas de abrazarlo y lo hice el solo se quedo hay sin hacer nada, me aparte -Lo siento-

-No, no te preocupes es solo que yo me llevo mejor con las maquinas que con las personas y normalmente a mis hijos les pasa lo mismo, pero habia olvidado que tu eres diferente- yo solo sonrei, mis ojos comenzaron a sentirse cansados y comenze a cerrarlos.

Me desperte en la cabaña en mis pies habia una pequeña bolsa de plastico, me acerque y la abri dentro de ella habia un cambio completo de ropa y un recado:

No sabemos que talla seas pero te conseguimos esto, ojala te guste.

Travis y Connor.

Habia una blusa identica a la que todos usaban, unos shorts, ropa interior, calcetines y unos converse. Tome una ducha, me cambie y empeze a cepillar mi cabello mientras lo hacia pensaba en el sueño con mi papa, estaba frente al espejo no era la misma chica a la cual estaba acostumbrada a ver con ojos tornasol, cabello castaño ondulado y siempre sonriente esta tenia enormes ojeras y la sonrisa ya no estaba.

Termine de arreglarme y me dirigi a dejar mis cosas a mi lugar en la cabaña, por accidente tire mi almohada y algo habia caido al suelo me acerque para recojerlo y ahi estaba el collar que mi padre me habia regalado lo tome rapido y este se abrio pense que lo habia roto excepto que dentro de el habia una foto de una hermosa mujer abrazando una pequeña, no podia creerlo eramos mi mama y yo, lo abraze fuerte y lo guarde en mi bolsillo. Mientras iba al comedor me encontre con el chico raro de la noche anterior