Carter Sthenky
Siento un severo golpe en la cabeza, la visa se me nubla, caigo al piso, me esfuerzo por recuperar la conciencia y abro los ojos, todo está borroso, veo un par de botas frente mí y luego ese penetrante olor no ayudaba en lo absoluto a recuperarme, por el contrario sentía que todo se me borraba, entonces un objeto filoso y delgado penetra mi brazo izquierdo, el líquido entra rápidamente y en segundos mi mundo desaparezco es como caer en un abismo profundo.
*
El viento es tenue, pero las gruesas cortinas se balancean en sintonía con él, a través de la ventana está el sol casi oculto entra las praderas de Nebraska, el atardecer era indudablemente hermoso y evoque una sonrisa.
- Hey!! – chillo mi hermano. ¿Estás enamorado? – dijo con burla y asquerosidad. Le diré a mamá y a papá. - Salió riéndose o más bien burlándose de l patraña que iba a hacer contra mí. Obviamente a esta edad la privacidad es muy importante y más que algo como de que estoy supuestamente enamorado sea "revelado" no me hace gracia.
- ¿Qué te pasa cabeza hueca? No estoy enamorado.
- ¿De verdad? ¿Entonces qué? – respondió con un gran grito y dando saltitos evitándome.
- Solo estaba suspirando – le explique. Soltó cuan carcajada.
- ¿Entonces por quién suspiras? – espeto poniendo sus manitas en la cintura e inclinando la cabeza a mi dirección a modo de burla. Es increíble como un crio de apena 10 años pueda resultar tan fastidioso.
- Ahora sí, paracito percudido. Te atrapare y tendrás que llorar – no tuve más remedio que ir de tras de el para seguirla el juego y a la vez que dijese una sola palabra a mis padres.
- Primero tendrás que atraparme cara de vomito – dijo y le seguí.
No vi nada más, escuche el sonido de martillos, hachas y toda clase de cosas chocando unas con otras, el sonido es tan estruendoso que en un momento estoy completamente despierto y activo. Pero aun así mis parpados pesan y mi cuerpo se siente como si estuviese aun en el abismo.
Ya no siento la tierra dura caliente desolada e involuntariamente familiar, que en donde por mucho tiempo me acompaño en mi aridez estancia. Ya no. Ahora me encontraba en un espacio tan diferente. En una habitación oscura con olor a humedad y a medicamentos fuertes es como si estuviese en una caja de pastillas vencidas desde hace diez años. El olor es tan imprégnate que me mantiene en la habitación girando a tal punto que me cabeza quiere volver al abismo en el que me hallaba, me obligo a mantenerme estable por más tiempo, aun tumbado en una de las muchas camillas que hay aquí trato de ver en donde estoy y de ayudar a mi memoria a recordar algo, no funciona, intento de nuevo, pero solo ve escenas borrosas y con poca luz todas me inspiran miedo estoy en el suelo y me duele el brazo, si, miro mi brazo inmediatamente efectivamente me inyectaron algo ¡¡oh no!! ¿Qué hago aquí? Dios, ¿en dónde estoy?
Muy tenuemente escucho el sonido de un gotear de agua o de lo que sea, era suave así que debo estar cerca de alguna tubería o algo parecido, hay voces graves de hombres atrás de la puerta que es demasiado vieja para mi época, veo tras los pedazos de cortina semitransparente que me separa de lo que parecía ser un salida de esta habitación.
- No Roger sabemos que es muy arriesgado no lo hare. – logre escuchar lo que estos decían. Imagine sus vestimentas como la de un médico.
- Pero Abel es lo que debemos hacer también sabes que no tenemos alternativa. – le respondió este otro con preocupación.
- No lo sé, me parece que esta vez el capitán está yendo demasiado lejos, con estos pobres. – termino este entrando tras la puerta de la habitación, sus voces se hicieron más fuertes y yo seguía en la camilla inmutable con ojos cerrados pero oídos atentos, pero no duro mucho, no podía evitar lo que el suero y el olor a medicamento estaban haciendo en mí y no logre escuchar nada más en concreto solo palabras sueltas y de allí de vuelta en el oscuro abismo.
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"Hay puertas que no deberían abrirse"
RandomComo si fuera un misterio, si, así justamente se puede conocer lo mejor y peor que le puede pasar a tu vida... Amelia, Carter y Marie se entrelazan en una historia que mas allá del misterio los llevo a su destino. - El pergamino.