Why Me? →Brandon Flynn.

11

—Emily, necesitó que no toques las hojas que están en mi escritorio, por favor.—ordeno al salir de mi habitación.

Mis padres tuvieron que salir nuevamente de casa, por negocios de mi padre.

Por lo qué me dejaron a cargo de mis hermanos, Jordan era él más inquieto de todos, y afortunadamente él fue él primero en dormirse, mientras Emily quién era más tranquila, se encontraba dibujando sentado a lado de mi en él escritorio, pues yo aún tenia una tarea y debía terminarla hoy, sí o sí.

Bajé a la cocina por un vaso de zumo de naranja, lo serví y cuando dí él primer sorbo mi celular comenzó a vibrar.

Pensando en que quizás era mi mamá respondí sin ver la pantalla.

—¿Mamá?, no te preocupes aún no eh quemado la casa sí es lo que te preocupa.—me apresure.

—¿Murphy?.—Oh dios.

—¿Flynn Rider?

—¿Flynn Rider?.—repitió indignado.

Solté una risa nerviosa.

—¡Sí!

—¿Cómo él de 'Enredados'?

¡Él sí sabe!

—¿Lo has visto?

Rió, y observó por la ventana frente al lavabo hacía él jardín trasero, él cuál se encuentra a oscuras.

Por lo que todos me dicen, es demasiado grande, y a mis hermanos les da miedo estar de noche solos ahí.

Y es probable que a mí también.

—Mis sobrinas me obligan.—se ríe.—¿Tus hermanos te obligan a ti?

¿Qué...?, ¿Cómo...?

—¿Cómo sabes que tengo hermanos?

Pregunto, y de repente un ruido del jardín se escuchó.

Me quedó paralizada, y trato de no hacer un escándalo, debía ser más astuta que él ladrón que estaba en mi jardín, por un momento pensé que Brandon me había colgado, pero no fue así..

Aún escuchaba su respiración en la línea, pero no su voz, ¿Se habrá dado cuenta de lo que yo escuche?

—Brandon.—Murmuré.—Te pregunté algo.

Él seguía sin responder y entonces a través de la ventana, apareció un Brandon sonriente.

—Aaron me lo dijo todo, sí esa es tu duda.

Reí mientras negaba en desaprobación.

—Me asustaste.

—Lo se, pude notarlo. ¿Puedes abrirme?

Dudé unos segundos, pero al final colgué y corrí a abrir y un Brandon sonriente entró plantando un beso en mi mejilla como saludo.

—¿Qué haces aquí?.—cuestioné, miré la hora en mi móvil y volví mi vista hacía él. —Y a esta hora.

1:09 AM.

—Vine a verte.—sonrió encogiéndose de brazos, era lindo cuando hacía eso.

—Mañana hay escuela, mañana puedes verme.

—Hoy es mañana.—soltó una risilla, y negué cerrando la puerta.

—Mi hermana sigue despierta, sí te descubre aquí... No dudará en contarle a mi madre que un chico entró. Y mi mamá empezará preguntándome que porqué tenía novio sin habérselo consultado, y papá me regañara por haberte metido a estas horas a la casa, y... Por dios. Será un lío.—gruñí.

—¿Soy tu novio?. —pregunta divertido.

—No.—Fruncí él ceño, cruzándome de brazos.

—Debería serlo.—dice y chasquea la lengua, para terminar relamiéndose los labios una vez más.—Ah, lo olvide. —dice y saca él libro color verde pasto de su pantalón.

—No puedo creer que hicieras eso.—reí, sin tocar él libro.

—No tenía donde guardarlo, fue lo mejor que se me ocurrió.—se excuso, y yo volví a reír.

—Desinfectalo por favor, yo iré a acostar a Emily.—dije bajo, y subí hasta mi habitación, como era de esperarse.

A Emily no le gustaba estar sola mucho tiempo, así que ya se encontraba acostada en mi cama, cubierta por completo con las cómodas cobijas.

La tomé en mis brazos y caminé a su habitación para despedirme de ella, saliendo de la de ella para después recargarme en él marco de la puerta de mi habitación para ver a un Brandon curioso.

—¿Qué haces?

—¿Porqué tienes tantos libros en tu escritorio y no en un estante?.—cuestionó.

Bufé aburrida y me adentré a mi habitación por completo, cerrándola y sentándome al borde de la cama.—Mis padres no han tenido tiempo de comprarme un estante.—admito.

Él me mira desde él escritorio y sonríe.—Deberían hacerte más caso, ¿Sabes?

—¿Cómo sabes que...?

—Investigue con Aaron, fue fácil.—me interrumpió, y se encogió de hombros.—Un par de cervezas y le sacas todo.

Ahora yo también tengo curiosidad.—¿Tus padres saben que estas aquí?. —cuestioné.

—No.—respondió en tono seco. —De hecho, no creó que les importe.

—¿Porqué no habría de importales a tus padres que...?

—Mi padre me abandono.—hablá. Y yo, no lo puedo creer.—Mi madre es drogadicta, normalmente suele drogarse para olvidar a sus ex-novios.

Quizás por eso estaba llorando en él baño de hombres.

—¿Vives con ella?

—Sí. Soy él más pequeño, mi hermana Katherine tiene dos hijos, y afortunadamente un gran matrimonio, mientras que mi hermano mayor, Richard...—pausa dando un gran suspiro.—Bueno... Murió por una doble dosis de droga hace unos dos años.

Eso, fue lo último que me hubiera imaginado en la vida de Brandon Flynn.

Pensé que él era él típico niño rico, con familia alegré, pero no.

Y la forma en que me lo contó, tan dura y directa.

Juró que su tono pudo haberme hecho llorar.

—No tenía idea, Flynn. —Murmuré.

Él, comenzó a sollozar, y eso me hizo sentir mal.

No lo conocía lo suficiente, pero al menos ahora sabía que él sufría.

Me levanté y me acerqué para abrazarlo, enredando mis brazos en su cuello mientras él recargaba su cabeza y lloriqueba en mi hombro, sujetándose de mi cintura como un niño asustado lo haría con su oso de peluche favorito.

Lo peor, es que no era todo.

Pues él continuo hablando.—Nadie lo sabe Murphy.—sollozó.—Pero ella me violaba cuando era niño.

Y eso, me partió aún más él corazón.

—Ojalá fuera yo la que esta sufriendo, y no tú.—susurré.

Él se alejó un poco para mirarme y, lo inesperado paso.

Brandon Flynn, me beso.

∞

¡ESTO NO SE LO ESPERABAN JAJA!