Sin previo aviso

Capítulo 3

Capítulo 3 – Sentimientos confusos

Selena despertó a causa de la luz solar que entraba por la ventana, se sentía extraña y con dolor de cabeza. Pronto se percató de que Marcos dormía a su lado desnudo, fue entonces cuando los recuerdos de aquella noche invadieron su mente y se ruborizó. Bebió tanto que algunas partes de la fiesta no podía recordarlas con claridad, ella no suele hacer esas cosas.

Marcos también despertó y al verse su torso desnudo reaccionó y vio a Selena a su lado mirándolo ruborizada.

– Esto… Buenos días… –No sabía que decir en aquel momento.

–Eh, buenos días… –Selena se tapa con la sabana, nota que Marcos tampoco se siente cómodo, este sin decir nada se viste y sale de la habitación. ¿Se marcha así después de haberse acostado con él? Selena no sabe que decir y se queda callada entonces él vuelve a entrar.

–Lo siento, yo no soy así… No sé qué ocurrió anoche… Bueno, nos acostamos pero…

–Yo tampoco soy así, no suelo acostarme con nadie que acabo de conocer… Supongo que fue el alcohol. –Le corta Selena.

–Sí… aunque a mí me gustaría conocerte. –Selena sonríe.

– A mí también.

– Este es mi número, llámame y tomamos un café –se lo apunta en un papelito y se lo deja en la mesita, después le da un beso en la mejilla y se despiden. Selena se siente feliz.

Mandy también despierta, por suerte está sola. Espera que ese chico, Leo, ya se haya marchado a su casa. La noche no fue para nada como ella esperaba, se acostó con él pero para nada disfrutó tanto como la última vez que lo hizo con Bryan. Es extraño pero ha estado pensando en él toda la noche.

Al levantarse se pone un camisón y decide ir a la cocina a comer algo a ver si se siente mejor. De camino observa lo sucio que ha quedado el salón después de la fiesta, piensa que a su compañera de piso le va a dar algo pero la encuentra en la cocina comiendo una tostada con mermelada y muy tranquila.

–¡Buenos días Mandy! –Saluda animada.

–Uf, buenos días pero por favor no grites tanto, tengo una resaca horrible…

–Come algo, yo ya me siento mucho mejor.

–Sí, aunque es raro… Deberías estar histérica por lo sucio que ha quedado todo. –Le dice Mandy.

– Es que anoche, te hice caso y… ¡Me acosté con Marcos! –Le confiesa.

– ¿De verdad? ¡No lo puedo creer! –Dice sonriendo –Pensaba que era imposible que te acostaras con alguien que acabas de conocer.

– Lo sé y la verdad fue increíble…  Al despertarnos ha sido algo vergonzoso pero hemos quedado en llamarnos.

–Entonces perfecto –sonríe su amiga.

–¿Y a ti como te fue la noche? –Pregunta – ¿No harías nada con Bryan delante de la gente?

–No, no soy tonta… Es mejor que nadie se entere. Pero sí que estuve con alguien –Le cuenta –con ese chico de la facultad, Leo.

– ¿Leo?

–Sí, bailamos, nos besamos y acabamos en la cama, aunque me arrepiento.

– ¿Tú arrepentida de acostarte con un tío? Que extraño… –Le comenta Selena.

–Sí, nunca me había pasado antes. En fin será mejor que limpiemos. –Mandy reacciona y cambia de tema, no quiere aceptar el hecho de que no deja de pensar en Bryan y de que anoche mientras hacia el amor con Leo también pensaba en él.