''Pierdes el juego''

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NA: hola guapuras! Siento muchísimo todo este tiempo que he estado sin escribir. La verdad es que no he tenido tiempo debido a los exámenes y a un viaje que he hecho a Portugal (una pasada por cierto), así que espero que me volváis a perdonar y rejuro que voy a escribir más seguido. Los quiere, Queen E.

Cogidos de la mano, Dylan y Lana paseaban por la abarrotada playa mirando de un lado a otro buscando a las amigas de esta ''¿Dónde se podían haber metido?'' pensaba Lana, haciendo conjeturas de cuantas de sus amigas estarían ahora mismo enrrollandose con un tío cualquiera, cuantas estarían tiradas por las calles o intentándo conseguir más alcohol. ''Que hijas de puta, y ella perdida por la playa. Bueno, no estaba del todo mal'' pensó mientras dirigía una mirada a Dylan.

-¿Qué miras?- Preguntó él sorprendido.- ¿Me pasa algo o qué?-

-¿Mirarte es un delito?- La rubia se regañó mentalmente por ser tan borde, pero ella era así. Si Dylan quería ser su ''amigo'' o alguna de diferentes variantes de las relaciones sociales, debería de ir acostumbrándose a su forma de ser, a poner muecas de asco, a sus risas inesperadas, a sus golpes a modo de reprimenda, a que un día estuviese en lo más alto y otro en lo más bajo.Tampoco es que tuviera muchas esperanzas de que la cosa que tenían, llámalo amistad o llámalo 'x'' , próperara, básicamente porque ¿cuántos amigos de fiestas te han durado en la vida? como mucho pueden ser conocidos.

-Si además me pones esas caras de desprecio después de lo bien que te he tratado puede ser que sí-

-Pues ya puedes esperar sentado a que reciba mi castigo- No le dió tiempo a terminar la frase cuando Dylan la había cargado en su hombro y echado a correr hacia la orilla de la playa, chocando con la gente y recibiendo algún que otro insulto. Cuando ya no puedo correr por el agua se lanzó modo bomba salpicando tanta agua como le era posible y lanzando a Lana al fondo del mar. Se había mojado el también, sí, pero la niña esa no se libraba.

Lana se levantó con su largo pelo rubio mojado y enrredado, el maquillaje corrido y la ropa mal colocada. Le daba igual, sólo pensaba en lanzarse sobre Dylan y hacerle pagar por lo que le había hecho.Metió la mano en el fondo del mar, y sacó un puñado de arena que fue a parar a la cara de Dylan, quien intentó zambullirse para esquivarlo. Mal hecho, porque Lana aprovechó la oportunidad para tirarse encima suya y ahogarlo un par de veces.

Y sin saber cómo, llegaron a un momento en el que estaban abrazados a escasos centímetros el uno del otro. Él la sujetaba por la cintura, fuerte para que no se le escapara. Ella le miraba  a los ojos que le hacian competencia al azul del mar.

-¿Puedo?- Rogó él con la voz entrecortada. Ella no lo dejo ni moverse, cuando ya se estaban fundiendo en un beso sabor a sal.

Salieron los dos riéndo del agua mientras que Dylan abrazaba a Lana. Ella tiritaba a causa del frío que le daba la ropa mojada, así que volvieron al hotel a cambiarse y seguir con la fiesta. ¡Qué bien habían empezado las vacaciones de primavera para ambos!

Lana sacó su tarjeta de sus pantalones y rezaba por que funcionase. ¡Gracias a Dios! por cierto, ¿Cómo lo harían para que fuesen impermeables? Se río a causa de su loca idea mientras abría la puerta. Ya estaba su mente de borracha desvariando cuando notó que la luz de dentro estaba encendida y en el suelo. Entró poco a poco lista para abrir la puerta que le separaba de lo que era la habitación en sí misma cuando bajó la mirada al suelo y vió unas manchas de sangre. Automáticamente abrió la puerta y se encontró un graffity pintado en la pared que decía: ''Encuentra a tus amigas o pierdes el juego, puta'' 

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